La feria del libro hace sitio a la producción de autores locales

En ese contexto, aunque no se trate de un producto exclusivamente literario, sino que comparte esa condición con la de pieza artística, una de las presentaciones más destacadas de esta edición fue la que tuvo lugar a última hora de viernes de la mano de María Jose Noain y Helga Massetani. Su 'Atlas emocional del Bidasoa' se mostraba al público por primera vez bajo la carpa del Ensanche y confirmaba excelente resultado en las dos vertientes: unos textos llenos de sentimiento comarcal que se reciben como una caricia y un concepto artístico sólido redondeado por el gran trabajo de ilustración de Elena Odriozola.

Entender el proyecto requiere aportar un poco de contexto. En 2019 Massetani y Noain obtuvieron una beca Ribera con su propuesta de elaborar la 'Cartografía emocional del Bidasoa'. Un año de «investigación documental, encuestas online, reuniones con escolares, entrevistas a vecinos de la comarca», recuerda Massetani, dejaron como resultado el mapa emocional y un dossier técnico de 200 páginas entregado todo al Ayuntamiento.

«Mucha de la gente que participó nos preguntaba cómo podían conocer los contenidos que habíamos recopilado. Nos pareció que debíamos intentar hacer una devolución a todas esas personas que nos ayudaron», indica la artista.

El formato elegido ha sido el de diez cuadernos que conforman el Atlas Emocional del Bidasoa y que se disponen «en una cajita, como una única pieza artística», comenta Massetani. Cada cuaderno «gira en torno a un tema. Hay algo de historia, antiguos oficios hoy desaparecido, la niñez, el río, el entorno natural...», comenta Noain, autora de los textos. «No es exclusivamente histórico ni antropológico ni medioambiental... tiene un poco de todo». Todo el conocimiento que ellas tenían y todo el que adquirieron en su investigación se combina con delicadeza en diez breves textos, sencillos, elegantes, sumamente cuidados, encabezado cada uno por la correspondiente ilustración de Odriozola. «Los dibujos van ajustados al tema de cada cuaderno. Algunos se entienden a la primera y los que no, en cuanto has leído el texto, ves que encajan perfectamente». Esas diez portadas, colocadas una junto a otra, mantienen y comparten una línea de horizonte que pasa de una a otra ilustración, siempre en color azul, que representa el nexo de unión que baña, literalmente, todo el contenido: el río Bidasoa.

El proyecto ha contado con el apoyo del programa Olatuak del departamento de Cultura de la Diputación Foral y las Ayudas a la Creación del Ayuntamiento de Irun. «Aún y todo, hemos tenido que poner dinero para la edición de los cuadernos», advierte Massetani, «por lo que la tirada inicial es un poco reducida». La cajita con las diez piezas se vende a 15 euros, de momento, previo contacto con las autoras en los correos info@losviajesdeaspasia.com o faktoria@bitamine.net. «Si la cosa va bien, queremos hacer otra edición más amplia y que se distribuya de manera más normalizada en diferentes puntos de la ciudad», informa Noain.

No es el único frente de futuro de este proyecto que quiere seguir escribiendo nuevos capítulos. «Tenemos ideas», dice la historiadora, «pero hay que ir paso a paso». El siguiente será presentar el proyecto en Canadá, en unas jornadas sobre el concepto de frontera que a comienzos de junio «se van a celebrar en Quebec y a las que nos han invitado», anuncia Massetani. En ese mismo mes, están previstas presentaciones «en las euskal etxeas de Argentina de la mano del instituto Etxepare. A la vuelta de todo eso, veremos con qué recursos y apoyos podemos contar para seguir explorando este proyecto» que, es conveniente recordarlo, prendió a raíz de aquella beca Ribera de 2019.

Otra cita relevante de la feria del libro de este año ha sido con la escritora local Noelia Lorenzo Pino. Aunque se haya convertido en una de las principales referentes de la novela negra vasca y sus miras comerciales hayan trascendido, la irundarra ha buscado no un hueco sino dos para acercarse a firmar a la carpa del Ensanche.

Fueron muchas las personas que entre el viernes por la tarde y sábado por la mañana se acercaron a solicitar la firma de Lorenzo en ejemplares de 'Animales heridos' y aprovecharon para conversar con ella. 'Animales heridos' cierra, al menos por el momento, la saga de Eider Chassereau y Jon Ander Macua, los investigadores de la Ertzaintza con los que la escritora ha ido creciendo a lo largo de cinco novelas. Ahora prepara un nuevo trabajo que ya no está planteado bajo ese mismo universo de ficción.

Además de Lorenzo, ayer se pasaron por la carpa María José Noain, que también repetía, esta vez en solitario con su trabajo 'Isabel de Francia', y Edurne Mitxeo, que presentó de manera muy trabajada y original su cuento 'Gau Beltza'. Un taller de manualidades por la mañana y un cuentacuentos vespertino completaron el programa del Día del Libro irunés.