Este año no se podrán ver los fuegos desde las rampas de los Relojes por su mal estado

DV. Las rampas de los Relojes no se podrán utilizar para ver los fuegos artificiales esta Semana Grande. El Ayuntamiento adoptará esta medida y otras del estilo por precaución ante la previsión de que por las obras del parking de La Concha más personas de lo habitual utilizaran este año las rampas ubicadas en mitad de la playa.

El precario estado de esta zona no es algo nuevo. Cuando los servicios de limpieza plantearon utilizar estas rampas para bajar a la playa los camiones y la cribadora de la arena, ante la estrechez provisional de la primera rampa de bajada a la playa -ubicada junto a las obras del parking-, los técnicos municipales ya advirtieron de que habría sido necesario reforzar este suelo -que es el techo de la discoteca La Rotonda- que no está diseñado para soportar grandes pesos.

Finalmente, se halló una solución para evitar que los grandes vehículos de limpieza no accedieran a la playa por este punto, gracias a un movimiento del vallado de la obra del parking que les permite maniobrar en el encuentro de la rampa con el paseo de La Concha.

Pero la fragilidad de las rampas de los Relojes surge cada vez que se plantea un uso intensivo de las mismas. El Ayuntamiento ha estudiado a fondo el asunto, ha encargado un informe técnico que, según han señalado a DV fuentes municipales, descarta que por la presencia masiva de personas pueda pasar algo, pero se va a curar en salud. Respecto al año pasado, lo que cambia es que las obras del parking de La Concha pueden empujar a más personas a los Relojes a ver los fuegos artificiales de Semana Grande.

Reunión de seguridad

Las medidas de seguridad que se van a adoptar salieron como conclusión de una reunión celebrada hace una semana en la que, además de técnicos y directores de departamentos, estuvieron presentes los concejales Denis Itxaso, Enrique Ramos y Alberto Rodríguez. En primer lugar, se acordó que las rampas de los Relojes no se utilicen para ver los fuegos artificiales. La gente tendrá que verlos desde la playa o desde el paseo de La Concha. En las rampas se colocará un sistema de «vallas móviles» para controlar que el flujo de entrada y salida de personas de la playa se produzca en una franja más estrecha de lo habitual para que no se produzca una acumulación excesiva de peso.

Toros de fuego

Además, se divulgarán por la megafonía de la playa mensajes para realizar un desalojo pausado tras los fuegos. Como complemento a todo ello, este año se ha decidido retrasar unos minutos la salida del toro de fuego. Esta atracción de la Semana Grande solía programarse justo después de los fuegos artificiales. Como es previsible que con las anteriores medidas la gente tardará más tiempo en salir de la playa este año, se ha previsto que el toro de fuego dé comienzo a las 23:30 horas, un cuarto de hora más tarde de lo habitual.