Xabier Erkizia, coordinador del Soinu Mapa, registra una grabación ambiental.
ARTELEKU REGISTRO DE PAISAJES SONOROS

Un mapa con sirenas y murmullos

Soinu Mapa, el Mapa Sonoro de Euskal Herria promovido desde Arteleku, suma más de trescientas grabaciones ambientales recogidas en nuestro entorno Soinu Mapa, el Mapa Sonoro de Euskal Herria promovido desde Arteleku, suma más de trescientas grabaciones ambientales recogidas en nuestro entorno

MIKEL G. GURPEGUI

Sábado, 6 de junio 2009, 04:02

Publicidad

DV. La sirena que cada mediodía suena en la donostiarra calle Garibai, el ruido del tráfico en elde Aritzeta, los cánticos de una misa celebrada en la basílica de Arantzazu, el estruendo de la granizada del otro día en Zarautz o la flauta del afilador por las calles de Errenteria. Son sonidos que nos rodean, parte de nuestro paisaje sonoro, que se pueden escuchar junto a otras trescientas grabaciones en , el Mapa Sonoro de Euskal Herria, un proyecto que acaba de renovarse.

El mapa, que está abierto a las aportaciones de quienes lo deseen, es una iniciativa de Audiolab, el departamento sonoro de Arteleku. Como explica su director, Xabier Erkizia, la idea de crear el Mapa Sonoro de Euskal Herria surgió hace ya cinco años entre «gente que trabaja en la música experimental. Muchos artistas sonoros trabajamos con grabaciones ambientales. Lógicamente, grabas mucho más de lo que usas. En una conversación surgió el comentario de cuántas horas de material sonoro tendríamos grabadas y si habría alguna forma de compartirlas».

Ese deseo, más el propósito de «fomentar una actitud de escucha» en nuestra sociedad, y la coincidencia de cierta preocupación institucional por la contaminación acústica, desembocó en Soinu Mapa, el Mapa Sonoro de Euskal Herria, que fue uno de los primeros en surgir entre otras iniciativas similares. Ahora se empieza a formar una red internacional y la propia web del mapa vasco enlaza con más de veinte recopilaciones sonoras en marcha en otros lugares

Subir 'on line'

El proyecto ha ido creciendo. Cuenta ya con más de trescientas grabaciones de campo y a lo largo de este año esperan sumar doscientas más. Muchos de los registros fonográficos son realizados por los coordinadores del proyecto, Xabier Erkizia y Oier Iruretagoiena, o proceden de las grabaciones que la artista mexicana Luz María Sanchez realizó durante su residencia en Arteleku y dejó cedidas. Pero también hay aportaciones de otros artistas que investigan en el sonido, y de particulares que se suman espontáneamente a la iniciativa.

Publicidad

La web acaba de ser actualizada precisamente para facilitar que cualquier usuario pueda subir rápidamente sus grabaciones ambientales. La versión renovada tiene también ventajas para quienes consultan el Soinu Mapa. Además de un nuevo diseño, da la opción de ver cuáles son los últimos sonidos incluídos y ofrece una clasificación de sonidos por medio de (etiquetas) y categorías: urbano, señales acústicas, naturaleza, mecánico, sociedad y otros.

El sistema sigue siendo el mismo. El visitante de se sitúa ante un gráfico de Google Maps en el que aparecen marcados numerosos puntos de Euskadi y su entorno. Pinchando en cada punto se recibe información de la grabación allí realizada, que se puede escuchar o descargar.

Publicidad

Olvidamos escuchar

Así, del ordenador pueden surgir los chirridos de las ruedas de los coches en el parking del Mercado de San Martín un día de lluvia, el murmullo del mar en Deba, los pitidos de los semáforos de una calle de Tolosa o el eco de una pelota contra el frontón de Idiazabal.

Con ello, más que un archivo antropológico, aunque también tenga ese valor, los promotores del Soinu Mapa buscan llamar la atención de la población sobre nuestro entorno sonoro, promover una actitud de escucha activa. Xabier Erkizia tiene claro que «en las sociedades occidentales nos hemos olvidado de cómo escuchar. En vez de realizar una escucha activa, nos imponemos con más volumen. Hemos perdido la capacidad de convivir con el silencio y reaccionamos generando más ruido y sepultando sonidos con otros a más volumen».

Publicidad

El proyecto tiene ese carácter de sensibilización y educativo, de «potenciar una cultura sonora, no sólo musical», aunque está abierto a otros usos. Las grabaciones se ofrecen bajo licencia Creative Commons, que permite usarlas y compartirlas libremente citando su origen.

«Hasta hace poco, los archivos se guardaban bajo llave -comenta Erkizia-. Ahora es importante que este archivo sonoro lo realicemos entre todos y sea libre y fácilmente consultable».

Desde el Audiolab de Arteleku nos animan a vivir con los oídos abiertos, a redescubrir nuestro paisaje sonoro, formado por mil ruidos, músicas, silencios, hablas y tonos. Para apreciarlo no hace falta llegar a los extremos de Xabier Erkizia. El artista sonoro de la comarca del Bidasoa navarro reconoce que «cuando voy de viaje, no saco fotos. Grabo sonidos. Tienen una capacidad evocadora tremenda». mgurpegui

Este contenido es exclusivo para suscriptores

Suscríbete los 2 primeros meses gratis

Publicidad