El gasto anual de este fármaco llega ya a 18,95 millones de euros en Euskadi
En Osakidetza aseguran que si se generaliza el uso de omeprazol entre los principios activos de IBP se ahorrarían casi ocho millones de euros al año
JM.V.
Lunes, 13 de febrero 2017, 06:44
Los inhibidores de la bomba de protones (IBP) son unos de los medicamentos más recetados en Euskadi y, entre todos ellos, el omeprazol, es el más prescrito en Osakidetza. En 2015 se recetaron 2.895.179 envases de IBP en Euskadi, que supusieron un gasto de 18,65 millones de euros, según los datos del Departamento de Salud.
Los registros de Osakidetza desvelan que el 69% de los envases (2.008.824) corresponden al omeprazol. No obstante, este principio activo, a pesar de ser el mayoritario, no es el que mayor gasto acumula. El omeprazol supuso el 27% del gasto (5 millones), mientras que otros principios activos, como el pantoprazol, del que solo se vendieron 438.225 envases, acumuló 6 millones de euros en gasto, o el rabeprazol, el más caro, que costó 1,5 millones por 69.818 envases.
El responsable del Centro vasco de Información de Medicamentos, Iñigo Aizpurua, recuerda que la «diferencia en principios activos es poca. Todos tienen genérico y hay diferencia de precio, pero en cuanto a eficacia y seguridad son similares. El más barato es el omeprazol y es el que más se prescribe».
Pero no lo suficiente. Según Osakidetza, si a los pacientes en tratamiento con otros IBP diferentes al omeprazol se les cambiara el tratamiento a éste, se «conseguirían ahorros considerables sin reducir la eficacia ni la seguridad de su tratamiento». Se ha calculado el impacto presupuestario que tendría esta medida dependiendo del grado de sustitución por omeprazol. Por ejemplo, si del consumo del resto de los IBP, el 70% hubiera sido omeprazol, el ahorro potencial obtenido habría sido de casi 8 millones de euros al año.
«Lo primero que queremos es que los IBP se prescriban solo cuando sea necesario. Y segundo, si se va a recetar, que se prescriba el omeprazol, que es el de mayor coste efectivo», añade Aizpurua.
Menos en otros países
Desde Osakidetza insisten en la banalización del consumo de estos IBP tanto en Euskadi (uno de cada diez vascos lo toma a diario), como en el resto del estado, donde las cifras son muy similares.
Los datos de 2014 recogidos por Salud indican que en Noruega el consumo es la mitad que en Euskadi. Mientras que aquí se consumen 100 dosis diarias por cada mil habitantes, en Francia se sitúa en 66,4 y en Italia en 77,7. Ante esta situación, algunos sistemas de salud europeos los han retirado de la lista de medicamentos subvencionados.