25 años del accidente que condenó al Concorde
Icono de la aeronáutica, simbolizó el lujo y el progreso, pero el siniestro, que dejó 113 víctimas, y la escasa rentabilidad precipitaron su fin
Una afilada flecha volando por encima de un 'colchón' de nubes. Es la única imagen en vuelo del mítico Concorde. La captó en 1985 el fotógrafo británico Adrian Meredith, a bordo de un caza bombardero de la Fuerza Área Británica (RAF) sobre el Mar de Irlanda. Solo pudo seguirle a esa velocidad (2.180 kilómetros por hora) durante cuatro minutos. Luego se quedó 'rezagado' y el Concorde siguió su ruta: Londres-Nueva York en tres horas. La otra línea comercial que cubría el famoso avión supersónico era París-Nueva York (3 horas y media).

CONCORDE
BOEING 787
61,6 m de largo
56,7 m de largo
CONCORDE
Velocidad de crucero:
2.180 Km/h (mach 2)
Techo de vuelo:
19.200 m
Autonomía de vuelo:
6.200 km
12,2 m
Envergadura
25,6 m
BOEING 787
Avión transoceánico actual
Velocidad de crucero:
903 Km/h (mach 0,85)
Techo de vuelo:
13.100 m
Autonomía de vuelo:
14.140 m
17 m
CONCORDE
Pasajeros: de 100 a 144
2,87 m
5,9 m
BOEING 787
Pasajeros: de 250 a 290
Ambos cortes están dibujados a escala para poder apreciar la diferencia de tamaño entre los fuselajes
Solo dos filas de asientos dobles. Los aviones transoceánicos actuales suelen tener tres filas triples de asientos y dos pasillos.
:: GRÁFICO I. TOLEDO

CONCORDE
BOEING 787
61,6 m de largo
56,7 m de largo
CONCORDE
Velocidad de crucero:
2.180 Km/h (mach 2)
Techo de vuelo:
19.200 m
Autonomía de vuelo:
6.200 km
12,2 m
Envergadura
25,6 m
BOEING 787
Avión transoceánico actual
Velocidad de crucero:
903 Km/h (mach 0,85)
Techo de vuelo:
13.100 m
Autonomía de vuelo:
14.140 m
17 m
CONCORDE
Pasajeros: de 100 a 144
2,87 m
5,9 m
BOEING 787
Pasajeros: de 250 a 290
Ambos cortes están dibujados a escala para poder apreciar la diferencia de tamaño entre los fuselajes
Solo dos filas de asientos dobles. Los aviones transoceánicos actuales suelen tener tres filas triples de asientos y dos pasillos.
:: GRÁFICO I. TOLEDO

CONCORDE
BOEING 787
61,6 m de largo
56,7 m de largo
Avión transoceánico actual
Velocidad de crucero:
2.180 Km/h (mach 2)
Velocidad de crucero:
903 Km/h (mach 0,85)
Techo de vuelo:
19.200 m
Techo de vuelo:
13.100 m
Autonomía de vuelo:
6.200 km
Autonomía de vuelo:
14.140 m
12,2 m
Envergadura
25,6 m
17 m
El morro se abate para facilitar el despegue y el aterrizaje
Envergadura
60,1 m
2,87 m
5,9 m
Pasajeros: de 100 a 144
Pasajeros: de 250 a 290
Solo dos filas de asientos dobles. Los aviones transoceánicos actuales suelen tener tres filas triples de asientos y dos pasillos.
Ambos cortes están dibujados a escala para poder apreciar la diferencia de tamaño entre los fuselajes
GRÁFICO: I. TOLEDO

CONCORDE
BOEING 787
61,6 m de largo
56,7 m de largo
Avión transoceánico actual
Velocidad de crucero:
2.180 Km/h (mach 2)
Velocidad de crucero:
903 Km/h (mach 0,85)
Techo de vuelo:
19.200 m
Techo de vuelo:
13.100 m
Autonomía de vuelo:
6.200 km
Autonomía de vuelo:
14.140 m
12,2 m
Envergadura
25,6 m
17 m
El morro se abate para facilitar el despegue y el aterrizaje
Envergadura
60,1 m
2,87 m
5,9 m
Pasajeros: de 100 a 144
Pasajeros: de 250 a 290
Solo dos filas de asientos dobles. Los aviones transoceánicos actuales suelen tener tres filas triples de asientos y dos pasillos.
Ambos cortes están dibujados a escala para poder apreciar la diferencia de tamaño entre los fuselajes
:: GRÁFICO I. TOLEDO
Este viernes se cumplen 25 años del accidente en el que murieron 113 personas y condenó a este ingenio de la aeronaútica. Fue también un golpe para la imagen internacional de la grandeza francesa (y también de la británica) y el fin de los aviones supersónicos de pasajeros.
Solo hubo dos. El primero fue el ruso Tupolev Tu-144, que se probó en la Nochevieja de 1968, dos meses antes que el Concorde. Hasta 1977 el soviético no llevó pasajeros y un accidente por una fuga de combustible en 1978, durante unas pruebas, le retiró de su corto servicio comercial.
Desde aquel momento toda la gloria se la llevaría el Concorde, una maravilla de la ingeniería fabricado con tecnología anglofrancesa (fue desarrollado por las compañías Air France y British Airways). Se construyeron veinte aparatos y catorce fueron destinados desde 1976 a uso comercial. «En aquella época no se había producido aún el gran salto tecnológico y el Concorde revolucionó la aviación», recuerda Ángel Valencia, catedrático de Ciencia Política de la Universidad de Valencia. «Fue muy puntero y se convirtió en un símbolo de la eficiencia, de la velocidad... En definitiva, un símbolo del progreso».
Hasta el fatídico accidente. El 25 de julio de 2000 el vuelo 4590 de Air France partió del aeropuerto París-Charles de Gaulle con rumbo al John F. Kennedy de Nueva York. A bordo, 9 tripulantes y 100 pasajeros que iban a embarcar en un crucero de dieciséis días que les llevaría de Nueva York a Ecuador. Poco después de despegar, la nave se estrelló en Gonesse, a nueve kilómetros. Fallecieron las 109 personas a bordo y otras 4 en tierra.
Cuatro años después se publicaron los resultados de la investigación. Según este informe, otro avión perdió una barra de titanio de 3 centímetros de ancho y 43 de largo durante el despegue. El Concorde pasó sobre la pieza metálica y esta rompió el neumático de una rueda, que explotó. Una parte del neumático –de unos 4,5 kilos– golpeó el ala del avión a más de 300 kilómetros por hora y el impacto envió una onda de presión que rompió un depósito de combustible, que se derramó sobre el ala incendiándose y haciendo perder potencia a los motores. El piloto puso rumbo al aeropuerto París-Le Bourget (a 13 kilómetros), pero el fuego fundió el ala izquierda, provocando que el aparato virara y cayera sobre un hotel del municipio de Gonesse, matando a 4 personas que estaban dentro. Lo que elevó el balance de fallecidos a 113.
El 'doblete' de Phil Collins
Era el primer accidente en treinta años de historia. Y, aunque no supuso la inmediata retirada de este modelo –seguiría volando hasta 2003–, sí lo sumió en la decadencia, ya que después de aquello descendió considerablemente la demanda de pasajeros –transportó en total a 2,5 millones de personas–. Demanda que caería a nivel mundial tras los atentados contra las Torres Gemelas al año siguiente.
Muy pocos querían montar ya en el Concorde, que había llevado a bordo a numerosas personalidades: desde la reina de Inglaterra y el duque de Edimburgo o el entonces príncipe Carlos a estrellas del cine como Elizabeth Taylor, Robert Redford o Sean Connery, el Papa Juan Pablo II o artistas de la talla de Mick Jagger, Elton John o Phil Collins, además de deportistas de élite y grandes empresarios.
A propósito de Phil Collins, una curiosidad. El 13 de julio de 1985 se celebraron simultáneamente dos conciertos del festival benéfico Live Aid (recaudaba fondos para paliar la hambruna en África), uno en Londres y otro en Filadelfia. El cantante británico participó en los dos eventos, ya que viajó entre ambos países en el Concorde... y llegó a tiempo.
«Adiós al sueño»
«El Concorde representaba la exclusividad, el lujo. Los que iban a bordo eran unos privilegiados porque no estaba al alcance de cualquiera viajar en un avión supersónico –un billete costaba el equivalente a 20.000 euros actuales–. Si en aquella época hubieran existido las redes sociales, habría sido muy fotografiado», apunta el catedrático.
Entre sus cifras mareantes, una: el millón de botellas de champán que bebieron los pasajeros para acompañar un menú con ensalada de langosta y trufas, pastel de salmón ahumado o pechuga de gallina guineana, entre otras delicias.
Se convirtió así en una suerte de viaje aspiracional. Pero el accidente y la poca rentabilidad de un aparato que consumía mucho y era caro de mantener «acabaron con el sueño». Adiós al único avión supersónico de pasajeros –hizo su último vuelo el 26 de noviembre de 2003–. Y a un símbolo. «El Concorde fue la imagen de la tecnología francesa. El Hermès de la aeronaútica», compara Ángel Valencia.
– De no haber sufrido aquel accidente, ¿seguiría volando hoy?
– No lo creo. Era caro y muy contaminante. No es, desde luego, la línea actual a seguir.
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