Caprichosas son las capas de toros y caballos

Mucho antes de la segunda pleamar del Día de La Virgen (13 horas 46 minutos) los caballos de la cuadra de Pablo Hermoso de Mendoza y los de Equigarce, gran criadero toledano de caballos de picar y arrastre, ya estaban en la plaza. Desde casi la primera bajamar que había sido a las 7 horas y 19 minutos. Estaban 'Nómada', lusitano castaño, 'Navegante', también lusitano pero tordo, 'Berlín', el gran luso hannoveriano castaño imprescindible en el último tercio, el del rejón que trae la muerte. Estaban 'Nairobi' e 'Ilusión' pero también 'Moro', 'Salto', 'Alfaro' y 'Café', que venían de ferias como la de Huesca, la de Tafalla o la de Pontevedra o recién habían subido desde la finca que la familia Cedillo tiene en Mocejón, Toledo, donde cuidan de las mejores monturas para el tercio de varas.

Jesús San José les servía pienso y agua mientras hablaba de lo caprichosas que pueden resultar las leyes de la herencia genética en cuestión de las capas de los caballos. Si 'Moro' (un conjunto mestizo, al igual que 'Salto', castaño) es negro y 'Alfaro', un luso bretón tambien castaño, asombroso es, el pelaje de 'Café, un alazán pelo de vaca arrodalado, lo que viene a significar que es rojo-canela con las crines y la cola más claras-manchado.

En esas conversaciones iban pasando las horas entre la primera bajamar y la segunda pleamar. Empezaban a sonar por megafonía las versiones del 'Festara' y el 'Agur Jaunak' que luego cantaría el Orfeón. Alguien recordó que en Pamplona hay mariachis y que en la emocionante despedida de Enrique Ponce en Dax (donde al finalizar la feria se canta siempre el 'Denok gire Jainkoak eginak') el día 7 tocó Gary Hoffman, el violonchelista ganador del premio Rostropovich y del que se alaba su maestría instrumental y la belleza del sonido de sui instrumento.

Todas las mañanas de las primeras tardes de feria son hermosas. Corría entre los dispositivos digitales de los aficionados de ley un vídeo en el que se veía a 'Almirante', el toro indultado en Azpeitia, siendo curado por el veterinario de ley Marcos Mozos para poder ser trasladado el mismo día a la ganadería que Murteira Grave tiene en Mourao, en el distrito de Évora, Alentejo, Portugal. Y bien que se comentaba a la fresca de los fardos de paja y heno acumulados en el patio de caballos, que de (en) caste le viene al toro pues ese 'Almirante', número 47, es hijo de un semental que ya de eral (becerro de ¡dos años!) fue indultado también.

Hermosas son las mañanas de todas las primeras tardes de Feria. Luego en los tendidos ves el vacío dejado por gentes con las que compartiste aplausos y broncas. En la fila 8, número 17 tendido 7, falta, por primera vez desde la inauguración de Illunbe, una gran señora, Lucía. Seguro que allá donde esté se habrá hecho o de Belmonte o de Joselito. Estará viendo faenas sublimes. La marea volvió a bajar a las 20.01.