Nueva imagen que ofrecerá San Bartolomé, con las modificaciones al inicio de la cuesta de Aldapeta.

El inicio de la cuesta de Aldapeta será una amplia zona llana de preferencia peatonal

Se retrasará el desnivel y se reducirá a un único carril de bajada, mientras que la subida se realizará por la nueva calle Lizarra

ESTRELLA VALLEJO

Martes, 24 de marzo 2015, 07:04

Prácticamente irreconocible. Así quedará la zona de San Bartolomé una vez que finalice la obra completa. Aunque para verlo aún habrá que esperar, los detalles del desarrollo urbanístico van afinándose y tras la primera modificación del Plan General (deben realizarse tres en total) el periodo de alegaciones ha dado paso a nuevos cambios que el Pleno se encargará de valorar y aprobar, si así lo considerase, la semana que viene.

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Único carril de bajada en Aldapeta. Uno de los cambios que más contraste visual y de hábitos provocará será la nueva imagen de la cuesta de Aldapeta. Los dos carriles actuales, uno de subida y otro de bajada, se reducirían a uno descendente, desviando el tráfico de subida por la nueva calle Lizarra que se creará junto a la plaza Easo. «Es una apuesta firme y un cambio fundamental para calmar el tráfico», explicó ayer Ricardo Burutaran. El concejal de Urbanismo detalló que esta primera modificación daría paso a una imagen mucho más amplia de la zona baja de la cuesta. Una gran acera de preferencia peatonal se crearía en el inicio de la misma, esquina con la calle Easo. En el periodo de exposición pública se planteó la peatonalización integral de ese tramo, pero los estudios de tráfico desaconsejaron la opción de convertirlo en fondo de saco. La propuesta «que más se acerca a las alegaciones» contempla allanar la zona inicial con la creación de una gran acera y la retirada de la barandilla actual. El paso de cebra dejaría de estar en desnivel, reperfilando la cuesta y retrasando el arranque de su inclinación entre dos y tres metros, lo que implicaría establecer las restricciones de velocidad pertinentes para regular la convivencia de peatones, ciclistas y vehículos. «Actualmente se trata de un punto conflictivo, por eso nuestra intención es crear una zona más amable que mejore el tránsito y la accesibilidad», expuso Burutaran.

Movilidad vertical. Otra de las modificaciones, relativa al desplazamiento vertical, contempla la posibilidad de crear en el Cerro un total de tres ascensores, dos más de los inicialmente planteados. Al elevador previsto en la calle Easo, frente al edificio de Bomberos, se le sumaría otro en Aldapeta «que iría por debajo de los jardines y afloraría en superficie en la zona de Lizarra», aclaró Ricardo Burutaran. Esto facilitaría el acceso a aquellos peatones que quisieran acercarse a la zona residencial y el hotel. La ubicación elegida para el tercer ascensor sería la plaza Arroka, permitiendo una mayor comodidad para acceder al colegio y a la zona alta de San Bartolomé. En este espacio se planteó inicialmente la colocación de unas escaleras mecánicas que finalmente serán sustituidas por escaleras corrientes, complementadas con dicho ascensor.

Equipamiento privado. Como consecuencia de varias alegaciones, las viviendas que iban a ubicarse en el edificio que surge detrás del futuro hotel (actual Convento de Compañía de María) serían trasladadas a otro edificio y sería un equipamiento privado, de propiedad del colegio Summa Aldapeta, el que se apropiase de ese espacio, tal y como se estableció. «Al colegio se le dio un aprovechamiento. En principio podrían poner algún tipo de residencia o ponerlo a la venta. En cualquier caso, dependería de ellos», señaló el concejal.

Más plazas de parking. En la aprobación inicial, según explicó Burutaran, se admitió la creación de un 10% más de plazas de aparcamiento. El planteamiento de los dos nuevos ascensores y la reordenación viaria, no previstas en la anterior modificación del Plan General, permitirían la creación de un total de 113 plazas para vehículos, es decir, un incremento de un 25%.

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Traslado de la Casa de Baños. El traslado de la Casa de Baños a la plaza Arroka albergará un nuevo diseño, al menos en lo que a la altura del edificio se refiere. En el planteamiento anterior se optó por una construcción de uso público, aún sin especificar, en seis alturas «que ahogaría la propia plaza», confesó Burutaran. Por ello, la modificación contempla edificar una única planta de 400 m2 sobre rasante de la misma altura de la Casa de Baños «y el resto será bajo rasante, sin renunciar a un solo metro. Debajo cabría la posibilidad de ubicar un aparcamiento, pero es algo que estaría por ver», matizó.

Mismos metros, menos viviendas. El número total de viviendas que albergará el cerro de San Bartolomé rondaban las 516. Si bien el concejal de Urbanismo dejó claro que el total de metros a edificar no sufrirá ninguna variación, sí lo hará el número de viviendas finales «porque hay más demanda de casas con tres habitaciones. En cualquier caso, el espacio total del techo será el mismo», insistió.

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Galerías comerciales. La superficie bruta alquilable será de 4.900 m2. La ordenación de este espacio terciario ubicado en la zona baja entre Aldapeta y la calle Easo estará sujeto a un Plan Especial con su plazo de alegaciones correspondiente. «El resto de la obra podría empezar aunque el destino de esas galerías no estuviera del todo definido», advirtió Burutaran.

Esta modificación del Plan General se someterá al Pleno la semana que viene. El concejal insinuó que «si la primera modificación fue aprobada por unanimidad, estamos casi seguros de que vamos a contar con la mayoría suficiente para llevarlo adelante». En tal caso, el documento se trasladaría a la Comisión de Ordenación del Territorio del País Vasco (COPU), que en un plazo de tres meses debería elaborar una informe para su aprobación definitiva, que se efectuaría a final de año y «en el invierno de 2016 podría comenzar la obra».

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