La zona cero de Zubieta
Las obras de la nueva sede del femenino meten una marcha más. Se ha levantado la estructura del nuevo edificio y el parking se ha deshabilitado. El club confía en poder jugar en Liga en el Z7 el fin de semana del 29 de septiembre, con aforo reducido
Para disfrutar de una nueva casa puntera hay que superar el mal trago de las obras primero. El lavado de cara al que se está sometiendo Zubieta desde 2022, para muchos desde antes, continúa en marcha, no se detiene. Primero fue el campo de hockey hierba junto al Hipódromo, luego la renovación de los edificios Gainditu y Gorabide, destinados al primer equipo y la cantera, y ahora es el turno del campo Z7, que acogerá la sede Izan para todos los conjuntos femeninos de la Real.
Los camiones, los operarios y las grúas no acaban de irse de las instalaciones blanquiazules, que ya han recuperado su pulso habitual con la vuelta al trabajo de los principales equipos, incluso con el inicio de la actividad de los conjuntos de la cantera.
El Z7 es en estos momentos la zona cero de Zubieta. El trajín de vehículos de obra en torno a la rampa que conecta la parte baja de las instalaciones con los campos Z5, Z6 y Z7 obliga a abrir bien los ojos. En el aparcamiento del Z7 se ha abierto un agujero de grandes dimensiones, una especie de cráter donde irá ubicado el nuevo parking subterráneo con capacidad para un centenar de plazas.
Mucho más adelantada va la obra del edificio donde se ubicará el vestuario y el gimnasio del primer equipo, detrás de la portería sur del campo, la más cercana a la cuesta de acceso a las instalaciones desde Mercabugati. Este nuevo edificio conectará con la tribuna principal y quedará alineado en forma de L.
De esta forma la tribuna principal pasará a contar con un aforo de 4.000 espectadores, actualmente es de 1.350. Debajo de la grada se distribuirán los vestuarios para el resto de los equipos, también para el Sanse en los días de partido como local. En ese mismo bloque se habilitarán además comedores para la plantilla, así como un espacio gastronómico abierto al público en la primera planta. En el semisótano irá Kubik, un espacio de tecnificación de última generación con unas dimensiones de 50x20 metros y una altura de 5 metros, que contará con una tecnología pionera aplicada al entrenamiento. Servirá para sacar el mejor rendimiento de las jugadoras.
Sin el parking habitual
El terreno de juego no se tocará. Debido a las obras, las jugadoras no han podido llevar a cabo ninguna sesión a puerta abierta durante la pretemporada, pero mantienen el mismo vestuario en el Z7 y bajan al gimnasio de Gorabide para realizar los ejercicios complementarios. No ha cambiado nada en el día a día de las protagonistas. La previsión es que en diciembre se puedan instalar ya en el nuevo edificio, cuya estructura está ya levantada.
En la actualidad no pueden utilizar el aparcamiento del Z7 para aparcar sus coches, por lo que lo hacen en la rampa de acceso o abajo en el parking de Gorabide. La idea del club es que el equipo comience jugando en Liga en el Z7, aunque no se descarta que en alguna fase de la obra tengan que jugar en otro campo. El primer partido en casa lo juegan el 29 de septiembre. Siempre y cuando jueguen como local en el Z7 se habilitará la grada para que los aficionados puedan asistir a los encuentros, aunque será con aforo reducido. En la actualidad han derribado la parte de la tribuna más cercana al córner del fondo sur, de ahí la imposibilidad para que la pretemporada del femenino se hubiera desarrollado a puerta abierta para el público.
La convivencia entre el trabajo del equipo femenino y las obras de renovación en el Z7 se desarrolla semana a semana. De momento las incomodidades para las futbolistas son escasas. Aún habrá que esperar al próximo año para que finalicen todas las obras en este punto de las instalaciones, que cuenta con un presupuesto que supera los 15 millones.
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