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Barry y Baena chocan las manosdespués de un gol del futbolista francés. EFE
Mucha marcha para no mirar hacia atrás
El informe del Villarreal

Mucha marcha para no mirar hacia atrás

El Villarreal de Marcelino imprime mucha intensidad a sus acciones, tiene un estilo de juego muy definido, pero también concede demasiado al rival

Imanol Troyano

San Sebastián

Domingo, 12 de enero 2025, 01:00

  1. 1

    El 4-4-2 clásico de Marcelino se transforma en ataque.

Al asturiano no le agrada que se le encasille con el 1-4-4-2, el dibujo que más ha empleado en su carrera como entrenador. Lo sigue utilizando ahora en el Villarreal, pero solo en fase defensiva, cuando su equipo trata de defenderse y recuperar el balón lo antes posible. En ataque, el conjunto castellonense se transforma de manera significativa, se quedan tan solo tres jugadores en la línea defensiva, aparecen cuatro hombres por dentro, dos carrileros y una referencia en la delantera.

  1. 2

    El imán de Parejo en la salida de balón.

El Villarreal hace salida de tres, quedándose los dos centrales (Albiol y Costa o Bailly) y el lateral derecho (Femenía), mientras el lateral izquierdo (Cardona o Bernat) coge altura en el carril zurdo. El primer apoyo en esta situación del juego lo suele ofrecer Parejo desde el pivote. El madrileño sigue como maestro de juego a sus 35 años. Mantiene el criterio en sus decisiones con balón ante una presión alta del rival. Al Villarreal le cuesta más elaborar su juego si el esférico no pasa por sus pies. Comesaña, su compañero en el doble pivote, también colabora en ese cometido cuando se cierran los caminos hacia Parejo. El vigués ha solido acostarse a la banda derecha entre lateral (Femenía) y extremo (Pino) para sumar líneas de pase, cuando ha fallado el plan A en iniciación.

  1. 3

    Baena se mete por dentro para hacer superioridades.

Álex Baena es una pieza fundamental en la propuesta de Marcelino. El de Roquetas de Mar parte aparentemente como extremo izquierdo, pero raras veces se le puede encontrar en esa demarcación en fase ofensiva, porque tiende a meterse a posiciones interiores una vez su equipo recobra la posesión de la pelota. Con él, el Villarreal forma un cuadrado en el centro del campo junto a otros tres compañeros (los dos pivotes y el segundo punta) para construir superioridades por dentro. Baena acaba moviéndose por todo el eje central del terreno de juego para ofrecerse y así poder hacer avanzar a los suyos. El internacional español también es fundamental en los giros de juego que lleva a cabo el equipo de derecha a izquierda para aprovechar las subidas del lateral izquierdo. Baena suele estar colocado en una posición estratégica en esas situaciones alrededor del vértice izquierdo del área contraria para filtrar balones al área o directamente disparar a portería.

  1. 4

    Vulnerable cuando el lateral izquierdo se queda alto.

Este Villarreal tiene un punto débil evidente cuando pierde la pelota y su lateral izquierdo queda demasiado alto y no le da tiempo para recuperar su sitio. El Leganés aprovechó muy bien esa circunstancia del juego en la última jornada. Sus dos goles llegaron al atacar la zona que había dejado libre Cardona por estar demasiado adelantado como carrilero. Así, los centrales Costa y Albiol tuvieron que orientarse hacia fuera, dejando el área más desguarnecida. En esas transiciones se muestra vulnerable el equipo de Marcelino. Imanol tendrá que elegir muy bien quién sale a por el lateral zurdo del Villarreal en fase defensiva y qué atacante se queda prevenido para explotar los espacios que dejará a su espalda Cardona o Bernat. Puede ser Kubo, pero también un delantero como Oyarzabal u Óskarsson. El técnico asturiano es consciente de ese riesgo y por eso suele colocar como central izquierdo a un hombre rápido (Costa o Bailly) y no a Albiol.

  1. 5

    Pino, la ausencia del extremo que abre el campo.

Este Villarreal asimétrico en ataque acumula más gente por banda derecha que por izquierda. Yeremi Pino es el extremo que le queda a Marcelino, siempre abierto para recibir y encarar a su par e irse por fuera. El canario es sinónimo de desequilibrio, por eso le echará en falta con total seguridad el lunes en el Reale Arena. Denis Suárez tiene muchas papeletas de ocupar el lugar de su compañero, pese a estar más acostumbrado a partir desde el otro costado. El conjunto amarillo perderá amenaza por fuera sin Pino.

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