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Navidades en la intimidad con turrones y mascarillas

Los políticos vascos se adaptan a las restricciones impuestas y lanzan un mensaje de responsabilidad ante unas fiestas marcadas por la amenaza del Covid

Elisa López

San Sebastián

Jueves, 24 de diciembre 2020, 06:27

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Unas Navidades tranquilas, sin moverse de casa y en la intimidad. La pandemia ha obligado a celebrar unas fiestas con escaso contacto social y sin bombo y platillo. Así lo defienden cinco políticos vascos en estas páginas. Sienten la obligación moral de ser responsables. Por ello, Bakartxo Tejeria (PNV), Maddalen Iriarte (EH Bildu), Eneko Andueza (PSE), Pilar Garrido (Podemos Euskadi) y Mikel Lezama (PP) apelan a la sensatez y mandan un aviso a navegantes: «Ya habrá tiempo de celebraciones, este año toca amoldarse a lo que hay».

«Ahora toca protegerse y cuidar a los demás»

Bakartxo Tejeria (PNV)

Bakartxo Tejeria bajo el arco instalado en el donostiarra puente de Santa Catalina. ARIZMENDI

«Este año no toca. Lo que toca es la responsabilidad. Ya llegarán otros tiempos». Bakartxo Tejeria tiene claro que lo que corresponde hacer en estas Navidades tan atípicas es cuidarse y proteger a los demás. La presidenta del Parlamento Vasco celebrará unas fiestas tranquilas, hogareñas y con pocos allegados. «Mi marido y yo tenemos familias muy extensas por lo que la idea de reunirnos todos está desechada hace tiempo. Y por supuesto, nada de moverse. Va a ser un tiempo para disfrutar con los niños, dar largos paseos y también para la lectura», confiesa.

La burbuja familiar de Bakartxo Tejeria es numerosa: «Somos seis convivientes y a nada que vengan mis aitas, que viven muy cerca, ya seríamos ocho. Por lo que las cenas de más de veinte con hermanos, sobrinos y demás, insisto, son imposibles». Pero en una casa con niñas de 15 y 11 años y mellizos de cuatro no hay tiempo de aburrirse y sí mucha diversión. No faltarán Olentzero y los Reyes Magos, que este año serán generosos porque todos lo merecen. Las niñas son muy responsables y especialmente cuidadosas con los aitonas por el miedo a posibles contagios. «Los pequeños están todavía en otra onda, son más gamberros, no paran de desarmar el árbol de Navidad, aunque este año está durando más», comenta entre risas. En este sentido, la presidenta de la Cámara vasca quiere poner en valor al profesorado por el trabajo tan duro que está llevando a cabo en estos tiempos difíciles: «Han sido capaces de mantener a los niños, con muy pocas bajas en ikastolas y escuelas, facilitando con ello que madres y padres que trabajamos fuera de casa podamos organizarnos mejor. Durante el confinamiento fue realmente complicado. Se merecen un aplauso».

«Ya habrá tiempo de fiestas más adelante»

MADDALEN IRIARTE (EH BILDU)

Maddalen Iriarte, posa ante al árbol de Navidad de la Cámara vasca.

«Ya decidimos entre todos que cada unidad familiar celebraría la Navidad con su burbuja. Lo hacemos por responsabilidad». La portavoz parlamentaria de EH Bildu considera que no es el momento de echar por la borda los esfuerzos realizados hasta ahora; confinamiento, cumplimiento de las medidas sanitarias, cierre de establecimientos... «Ya habrá tiempo de fiestas más adelante», afirma convencida.

En su casa, pese a que en algún momento alguno de sus cinco hijos se ha confinado por precaución, están pasando la pandemia sin sustos. Por eso recuerda con tristeza a quienes «no pueden decir lo mismo porque han vivido la muerte de sus seres más queridos». En este sentido apela a la sensatez: «Todavía tenemos datos preocupantes y pensar en la vacuna no nos debe hacer bajar la guardia». Pero más allá de la responsabilidad, la alegría y la diversión también tendrán hueco en casa de Maddalen Iriarte. «Nos solemos reunir unos veinte, pero este año nos toca a los siete de casa, aún a sabiendas de que mis padres se van a quedar solos... Ya nos las ingeniaremos para sentirnos cerca aunque sea por videoconferencia». Una burbuja familiar de siete, «la de todos los días», que intentará sacar brillo a la Navidad: «Haremos menús especiales. Mi hijo pequeño, de 14 años, estaba emocionado por instalar el árbol y así lo hemos hecho, lleno de luces, y nos haremos algún regalito. La reflexión que les hago a los cinco es la suerte que tenemos porque estamos sanos... Y les digo que la mejor manera de querer a los aitonas es no estar con ellos. Y cuando los datos sean otros, ya nos reuniremos todos».

«El ambiente no es el más propicio para celebraciones»

ENEKO ANDUEZA (PSE-EE)

Eneko Andueza ha adornado la casa con motivos navideños para dar un ambiente festivo a sus hijos de 6 y 7 años.

Con un círculo muy reducido y en casa. Así pasará Eneko Andueza estas Navidades. Ni grandes eventos ni grandes despliegues. Unas fiestas tranquilas. «No somos una familia extensa por lo que en ningún caso estaremos más de seis o siete personas. La idea es celebrar estos días de una manera sencilla y movernos lo menos posible». Este año, de hecho, el secretario general de los socialistas guipuzcoanos no viajará a Morales del Toro, el pueblo de sus abuelos en Zamora, donde mantiene un vínculo muy estrecho con su familia y amigos de la infancia. Porque, como reconoce el también portavoz parlamentario del PSE, más allá de cumplir con las restricciones sanitarias, es ya una cuestión de ánimo: «El ambiente no es el más propicio ni invita a grandes celebraciones. Ya llegarán otras Navidades. Ahora lo importante es cuidarse».

En cualquier caso, lo que sí se celebrará, como siempre, en casa de Eneko Andueza es la llegada de Olentzero y de los Reyes Magos. «Con dos hijos de 6 y 7 años intentaremos hacerlo de manera que para ellos sea lo menos traumático posible, respetando ese momento de ilusión y tan especial para los niños. ¡Con lo bien que se están portando los más pequeños!». Tampoco faltarán los platos que el socialista prepara para su familia. Esos días le gusta llevar el peso de la cocina. Y como buen chef elaborará recetas especiales como caracoles, rabo con carrilleras o ensaladilla de salmón, «que seguro que harán las delicias de la concurrencia», confiesa entre bromas.

«Los abrazos en estas fechas tendrán que ser virtuales»

PILAR GARRIDO (PODEMOS)

Pilar Garrido posa junto a 'El abrazo', escultura luminosa del artista Iñigo Arístegui. LOBO ALTUNA

«Cuando se está al frente de la comisión de Presupuestos del Estado y a las puertas de la Navidad, lo que más apetecería serían unas fiestas rodeado de familia y amigos para desconectar de la actividad política (si es que se puede)». Sin embargo, Pilar Garrido ha borrado de su agenda los encuentros y cenas de cuadrilla, «los abrazos en estas fechas tendrán que ser virtuales», admite. Para la coordinadora general de Podemos Ahal Dugu «son fechas para la responsabilidad, de modo que habrá que amoldarse a lo que exigen 'las Navidades de la pandemia'». En su caso, habrá más contacto con la naturaleza y serán habituales los paseos por la playa y el monte que a veces echa de menos: «Atravesar la playa de La Zurriola, retomar mi relación con los senderos de Ulia y 'perderme' por Cristina Enea son actividades marcadas en mi calendario navideño».

Para Pilar Garrido estos días son propicios para recopilar libros y devorar páginas. Así que espera que su gente le regale algún libro, y afirma que la literatura tendrá un hueco privilegiado en la cesta de regalos que, además, llevará la firma de las tiendas de barrio. Y disfrutará de los suyos porque, en muchas ocasiones, los viajes a Madrid, como diputada de Unidas Podemos se lo impiden. También quiere recordar a las familias que viven estas fechas marcadas por las ausencias de sus seres queridos por culpa del Covid: «El deseo para estas Navidades se escribe con esperanza».

«Lo más importante ahora es que nos portemos bien»

MIKEL LEZAMA (PP)

Mikel Lezama volverá estos días a Formigal, donde trabaja toda la temporada como entrenador de esquí.

Las de Mikel Lezama van a ser unas fiestas realmente atípicas. Pero no solo por el Covid. El trabajo le llama siempre en esta época del año. Porque además de concejal del Ayuntamiento de San Sebastián y portavoz del PP vasco, ejerce de entrenador de esquí en Formigal. «Si finalmente no cierran las estaciones, me tocará trabajar, por lo que estas Navidades las celebraré solo», explica este deportista de 27 años, que hasta hace poco era preparador físico en el Centro de Tecnificación Aragonés. Hacía las temporadas de invierno en Formigal y el resto del año lo pasaba en San Sebastián. Hasta que la política se cruzó en su camino. Pero deja claro que su intención es no dejar su trabajo: «Es mi pasión y además quién está en lo público no debe perder nunca el contacto con la vida real».

Aunque no pasará la Nochebuena con sus padres en San Sebastián, la Nochevieja sí la compartirá en Formigal, por lo menos para comer las uvas, con algún amigo y compañero de trabajo. «Ellos cenan con sus familias y luego vienen a mi casa a tomar la primera copa de cava, pero nos vamos a la cama rapidito porque el día de Año Nuevo madrugamos», reconoce. Eso sí, se considera 'cocinillas' y, por tanto, algún capricho gastronómico se dará. No obstante, confiesa que, pese a todo, lo importante es que «nos portemos bien y que la vacuna llegue. Ese sería el mejor regalo».

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