ERC alienta la rebelión sobre los remanentes municipales y llama a los alcaldes a plantarse

La advertencia de Aragonès se produjo tras un encuentro con alcaldes de ERC en la localidad barcelonesa de Moià, en el que también participó el presidente del Parlament, Roger Torrent. Así que la amenaza no se limitó a una mera declaración, sino que estuvo secundada por una docena de alcaldes, que mostraron su disconformidad con la cesión de remanentes que plantea el Gobierno central. Una postura que, en Euskadi, comparten tanto el PNV como EH Bildu, que también han denunciado el decreto y han defendido la «singularidad foral» de los ayuntamientos vascos, que dependen financieramente de las diputaciones forales. Incluso los alcaldes del PSE han emitido esta semana un comunicado para reivindicar esa singularidad foral y que los remanentes de los municipios vascos «se queden aquí».

Aragonès pidió ayer a Sánchez que «dé marcha atrás» con este decreto -que deberá votarse en septiembre en el Congreso y que ahora mismo está muy lejos de la mayoría necesaria para ser aprobado- y advirtió de que los ayuntamientos catalanes planean «plantarse» y negarse a ceder el superávit acumulado en los últimos años. A juicio del vicepresidente del Govern, el Ejecutivo de PSOE y Unidas Podemos debería replantear el decreto por el que, en virtud del acuerdo firmado con la Federación Española de Municipios y Provincias (FEMP), se distribuirían 5.000 millones entre los ayuntamientos que transfieran 'voluntariamente' sus remanentes al Estado.

En caso de que Sánchez mantenga su decreto, el coordinador nacional de ERC consideró que los partidos que se consideren «municipalistas» deberían tumbarlo en el Congreso. En ese supuesto, animó a los diputados del PSC y de los 'comunes' a «romper la disciplina de voto» y a oponerse a un decreto que entorpecería la lucha contra la crisis del Covid-19.

Para el vicepresidente catalán, la cesión de los remanentes a Hacienda es una medida errónea porque «quita herramientas» a los ayuntamientos, que son la administración más cercana a los ciudadanos y quien mejor puede responder a sus necesidades. ERC, partido que ganó las elecciones municipales de mayo de 2019 en Cataluña, ya avanzó la semana pasada que ningún consistorio bajo su batuta cedería los remanentes a Hacienda, porque lo consideran «una maniobra de confiscación oculta de sus ahorros». Y alentó a los alcaldes de otros colores, también a los de PSC y los 'comunes', a no ceder sus remanentes de tesorería, pues «tardarían dos décadas en volver», advirtió.