Hautza: a las puertas del Olimpo

Grandes bandos de grullas dibujaban 'Vs' interminable cielo azul ,mientras siguiendo su GPS se dirigían al Sur de la Península. Su inconfundible canto se escuchaba perfectamente desde la cima del monte Hautza (1.306 m.) a pesar de la distancia que nos separaba de ellas. A escasos metros de nuestras cabezas un quinteto de buitres leonados rastreaba cada centímetro de la montaña navarra y junto a ellos, otra rapaz de menor tamaño con una estampa preciosa en la que destacaba su plumaje blanco que inundaba su pecho, cabeza y parte de sus alas. Por un segundo dudamos si se podría tratar de un quebrantahuesos, pero aunque haya quedado en un sueño, disfrutamos de su estampa en un cielo azul, en el que su vuelo es perfecto mientras se deja arrastrar por el viento Sur.

Es solo una de las bellas imágenes que queda grabada. Ante nuestros ojos, kilómetros y kilómetros hasta los Pirineos o el mar nos permiten descubrir montes, bosques, poblaciones de diferentes tamaños, caseríos dispersados de Baztan o el valle de Aldude. El puerto de Izpegi, justo encima de Baigorri y Erratzu, desde donde partimos para realizar la ruta a Hautza nos sitúa a un lado u otro de la muga,

Erratzu es la localidad más cercana, pero Arizkun, Irurita o incluso Elizondo se sitúan a unos kilómetros. Aldude, Baigorri, Banka, Ortzaize y Urepel al otro lado.

La relación entre las familias de un lado u otro ha sido fluida durante generaciones. No se puede olvidar que en Baigorri se encuentra el castillo Etxauzia, testigo de una época en la que esta localidad perteneció al antiguo Reino de Navarra. El puente romano de Baigorri es un punto estratégico desde el que admirar el lugar, bastión de los señores de Etxauzia desde el siglo XI hasta el XIX. Se da la particularidad de que los pueblos de Banka, Aldude y Urepel fueron fundados por los miembros más jóvenes de las familias de Baigorri. La localidad de Aldude sobresale por ser la cuna del jamón DOP Kintoa, producido con una raza porcina autóctona también conocida como 'Euskal Txerria'. Pierre Oteitza es un gran impulsor de esta raza y todos los productos que se elabora con su carne. El artesano de Aldude artesano, sala y refina al aire en el secadero colectivo, jamones de Kintoa AOP, jamones del valle embutidos, chorizos, embutidos,... En estos momentos bajo el sello de Kintoa se reunen 70 productores, de los que nueve se situan a este lado de Bidasoa.

Siguiendo con las delicias gastronómicas de la zona hay que destacar que Baigorri es la sede de la bodega cooperativa Irulegiko Arnoa. Esta última es una Denominación de Origen Protegida que se extiende a lo largo de 15 municipios entre Baigorri y Donibane Garazi. La bodega Irulegi, agrupa en una cooperativa la producción de más de doscientos de hectáreas de viñedos de la zona, más de un centenar con denominación de origen controlado Irulegi. La tradición vinícola de la comarca de Irulegi se remonta al siglo XII, cuando los monjes de la Abadía de Roncesvalles plantaron los primeros viñedos alrededor de los prioratos de Irulegi y Anhauze, aunque hay constancia de su elaboración en la época de ocupación Romana (siglo III). Cabe destacar que durante el siglo XVIII el vino de Irulegi goza de fama y prosperidad, ya que viaja a países como Alemania, Inglaterra y Holanda desde el puerto de Baiona

Hace más de medio siglo, los viticultores crearon la sociedad cooperativa agrícola de Irulegi para dar un nuevo impulso a la producción vinícola, que había casi desaparecido después de alcanzar una extensión de viñedo de 500 ha, cifra jamás superada hasta el momento.

Alrededor de 40 productores de la zona están realizando una gran labor en su recuperación y elaboración apostando por un vino de calidad siguiendo de sus ancestros que tuvieron que hacer frente al Oídio en 1868 y más tarde la Filoxera, determinan la historia de este viñedo, ya que el azote de estas dos enfermedades hacen que comience su declive durante el siglo XIX.

El vino ha sido y es importante en el valle de Aldude y hoy día mantiene la relación de esta zona de Behenafarroa con el viejo reino. De hecho, existe un proyecto de cooperación transfronteriza basado en el enoturismo muy interesante.

El enoturismo es solo uno de los atractivos de esta zona al que se suma el senderismo. Hay muchísimas rutas de todos los niveles a lo largo de todo el territorio de Quinto Real. A un lado u otro de la mugase extienden grandes zonas de pasto en el que se alimentan ovejas, yeguas y vacas. Además, se encuentra uno de los hayedos más importantes de Europa, y la referencia absoluta en Navarra de un bosque de casi 6.000 hectáreas. Como no se puede explotar, conserva una fauna y una flora difícilmente igualable en otras reservas naturales.

Los tesoros naturaldes de la zona son inumerables y aunque algunos merecen más que unas líneas, cabe destacar que una de las rutas más habituales hasta Hautza parte desde Erratzu. La preciosas localidad de Baztan cuenta con un molino en activo que puede visitar, aunque el máximo atractivo de la misma para uchos es la coqueta cascada de Xorroxin que goza de abundante agua. La ruta propuesta nace en verano de 2017 con el objetivo de descongestionar el barrio de Gorostapolo y ofrecer al visitante un sendero circular con escasa dificultad.

Subir a Hautza desde Erratzu es una interesante opción, aunque nosotras hoy hemos optado por iniciar nuestro recorrido desde el alto del puerto de Izpegi. Tras estacionar nuestro vehículo en el amplio parking junto a la venta, comenzamos la marcha siguiendo el camino balizado en dirección Sur, ganando altura por un frondoso bosque de robles y hayedos hasta llegar al collado de Nekaitz. La pendiente no es destacable, pero sí, constante,

Tras ascender por el hayedo por un sendero estrecho esquivando numerosas raíces llegaremos hasta el portillo de Olarte, un paso entre dos rocas que nos conducirá al collado de Nekaitz. Disfrutaremos de un tramo tranquilo hasta el collado Elorrieta en el que nuevamente nos adentraremos en un hayedo en el que las marcas de pintura nos conducirán hasta el collado Harrigorri. A lo largo del recorrido existen marcas naranjas, así como rojas y blancas y verdes y blancas. También existen varios paneles e indicadores verticales. Avanzamos por el sendero encontrándonos rocas en el camino que anuncian la cercanía de la cima de Harrigorri a nuestra derecha. Después de dejarlo atrás, debemos hacer frente a la gran pendiente que nos situará en la explanada del monte Hautza. Un regalo por las vistas, pero también por su monumento de penitentes. Fascinante.

Regresamos por el mismo sendero hasta el collado de Elorrieta donde se encuentra su dolmen. Ahí en lugar de ascender hasta el portillo de Olarte, seguimos el sendero de la derecha señalizado con marcas rojas y blancas que por un único sendero nos conduce nuevamente al parking de Izpegi.