Urkullu defiende un «gran pacto» para una renovación «plural» del autogobierno

El debate sobre la actualización del autogobierno vasco a través de un nuevo estatus político ha quedado sepultado en los últimos meses por la urgencia de la pandemia, aunque el PNV decidió rescatarlo este jueves en el arranque de la campaña. No lo hizo tanto para alimentar una pugna identitaria como para reivindicar la importancia del autogobierno reconocido, y del potencial, para hacer frente a la crisis económica y social que ha provocado el coronavirus. El candidato jeltzale a la reelección como lehendakari, Iñigo Urkullu, se decantó con claridad por un «gran pacto» basado en la «pluralidad de identidades», que trasciende las bases para el nuevo estatus pactadas en su día por PNV y EH Bildu. «Acordar no es claudicar», lanzó Urkullu a quienes desde la coalición soberanista le acusan de incumplir sus compromisos.

La elección de la Casa de Juntas de Gernika para abrir la campaña fue todo un guiño del PNV hacia el autogobierno vasco, como se encargaron de recordar el aspirante a Lehendakaritza y el presidente del EBB, Andoni Ortuzar. «Este lugar nos recuerda la fuerza que el pueblo vasco siempre ha tenido para ponerse en pie, incluso en los momentos de mayor sufrimiento», enfatizó Urkullu, que añadió que «de esta crisis también saldremos, y lo haremos todos a una». El actual inquilino de Ajuria Enea destacó que «nuestro autogobierno ha sido el cimiento para responder al primer embate de la Covid» y advirtió que «ahora debemos hacer frente al segundo embate: una crisis económica durísima».

Para ello, Urkullu se mostró partidario de «fortalecer y profundizar nuestro autogobierno» a través de «un gran pacto social y político para su actualización». Lo definió como «un acuerdo sólido y duradero que nos permita adaptarnos a los cambios sociales» y «nos acerque más a Europa». Reconoció que «el Estatuto de Gernika ha hecho posible la institucionalización de Euskadi y alcanzar un alto grado de progreso, bienestar y justicia social», pero calificó su renovación de «imprescindible» para «hacernos más fuertes como país».

Recordó que la ponencia de autogobierno del Parlamento ha trabajado esta legislatura para lograr un texto final -pactado mayoritariamente por PNV, Elkarrekin Podemos y PSE- que «es una base que nos permite ser optimistas para contar con un nuevo estatus para Euskadi», aunque subrayó que el camino debe ser «renovar y ampliar los consensos sociales». Se mostró partidario de «dejar los bucles de negatividad, conflictividad y maximalismos» y defendió que la «construcción nacional» no olvide que «somos una sociedad plural» y que «la pluralidad interna es un elemento constitutivo de nuestra manera de ser. El reto es construir desde la diversidad de identidades». Dejó caer que «acordar no es claudicar, sino avanzar juntos hacia un proyecto de nación compartido» y defendió «un camino que sume y nunca reste, que sea realizable y asumible por una mayoría de la sociedad vasca».

A la hora de concretar cuáles serían las bases de ese nuevo estatus «plural», Urkullu subrayó que «autogobierno es sinónimo de pacto, y no hay pacto sin un sistema de garantías recíprocas de bilateralidad efectiva». Lo que lleva al PNV a proponer «un sistema de relación Euskadi-Estado que impida la modificación unilateral del autogobierno». En resumen, lograr «más y mejor autogobierno para Euskadi».

Andoni Ortuzar comenzó su intervención explicando que lo habitual es que el PNV inicie las campañas en alguna de las capitales vascas, pero incidió en la idea de que, en esta ocasión, han querido dar un carácter «solemne» a esta arranque al considerar que la crisis provocada por la Covid convierte estas elecciones en excepcionales. Definió Gernika como «símbolo de reconstrucción y dignidad» y avanzó que «lo dicho ante el Árbol de Gernika compromete especialmente al PNV». Fue en ese momento cuando lanzó la idea de un «Plan Nacional Vasco de reconstrucción y relanzamiento», cuyas iniciales coincidirían con las siglas del partido jeltzale. «Aquí está el PNV para volver a poner en pie a este pueblo», exclamó Ortuzar.

El líder del EBB también hizo un llamamiento para evitar la abstención el 12-J. «Sabemos que habrá gente temerosa, que pensará si merece la pena ir a votar. Es normal después de lo que estamos pasando, pero me quiero dirigir a esas personas para decirles que claro que merece la pena ir a votar. Hay que ir sin miedo, con ilusión, porque el 12 de julio comienza la reconstrucción de Euskadi».

La cabeza de lista del PNV por Gipuzkoa, Bakartxo Tejeria, anunció que su partido «trabajará para hacer del coronavirus una oportunidad, para que este pueblo siga posicionándose entre las naciones más avanzadas de Europa».