La nieve: ni está ni se le espera a corto plazo

Los esquiadores se las prometían felices. Una impresionante nevada, a finales de octubre, hacía presagiar una buena temporada de nieve. Hacía muchos años que en el mes de noviembre no se acumulaba un manto nival tan espeso. Pero de la esperanza se pasó a la desilusión. Y de esta, a las pérdidas millonarias. El oro blanco de las estaciones no ha llegado. Y la campaña está a un paso de llegar a su mes más fuerte, el de febrero. De momento las condiciones no han sido las mejores ni en el puente de la Inmaculada ni en estas fechas navideñas.

Un fuerte anticiclón se situó en Europa a primeros de diciembre y ni se ha movido ni parece que a corto plazo tenga intención de hacerlo. De momento, para la próxima semana las previsiones siguen hablando de sol y estabilidad. Eso sí, las temperaturas van a bajar, sobre todo las mínimas, lo que permitirá seguir haciendo nieve de forma artificial, que de momento es la gran protagonista.

El tema es serio, no solo para las estaciones de esquí, que arrastran ya pérdidas importantes, sino para los cientos de negocios que se mueven alrededor de esta actividad. Bares, restaurantes, hoteles, comercios, monitores... Todo se resiente cuando la nieve no llega. Y este año no ha llegado. Por ello, hay centros invernales que todavía no han podido poner sus remontes en funcionamiento a pesar de encontrarnos ya en enero. Es el caso de Candanchú, bien conocida y visitada por cientos de guipuzcoanos desde hace muchos años. O de Panticosa, por hablar de algunas de las más cercanas. No les voy a decir que en algunas pistas estén floreciendo las margaritas, pero poco le falta, porque los días de sol se suceden uno tras otro y, como les cuento, de momento la meteorología no va a cambiar. La situación es alarmante y, a no ser que se produzca un cambio radical en las condiciones en la segunda quincena de este mes, las pérdidas serán todavía mayores.

En lo que respecta a España, la excepción la encontramos en el sur, ya que Sierra Nevada tiene en funcionamiento 18 de sus 21 remontes, lleva muchas semanas abierta y llega a acumular hasta 150 centímetros de nieve en su parte más alta. Pero es la excepción.

En la Cordillera Cantábrica, por ejemplo, no hay una sola estación abierta. Alto Campo, San Isidro, Leitariegos, Lunada... Todas las estaciones están cerradas, cuando a finales de octubre acumulaban unas importantes cantidades de nieve.

En Valdezcaray los nueve remontes siguen parados. En el Sistema Ibérico solo se puede esquiar, y en precario, en Valdelinares -cinco pistas abiertas- y en el Central ninguna de sus cuatro estaciones está en funcionamiento.

El problema no solo atañe a los centros españoles, porque en el Pirineo francés algunos como Artouste, Gourette, Gavarnie, Hautacam o Val Louron también están cerrados y no hay una sola estación que tenga todos sus remontes en marcha. Hay un dato desolador y es que ninguna estación del Pirineo alcanza a primeros de enero el metro de nieve y la mayoría no tienen en sus pistas más altas ni siquiera medio metro.

Las estaciones, sin embargo, no se rinden y siguen suplicando para que el anticiclón se mueva, entren los frentes, como es normal en esta época, y nieve por fin de forma copiosa. Mientras tanto, la mayoría sobrevive gracias a la nieve de cañón y se afana en poner todas las pistas posibles en la mejores condiciones.

Los centros se encuentran con el problema añadido de que no ha caído una gran nevada con la que hacer la base para toda la temporada y completarla, si hace falta, con nieve de cañón. Pero día a día ponen sus cañones en marcha cuando las condiciones de temperatura y humedad lo permiten. Por lo menos esta semana el termómetro va a caer mucho por las noches, con fuertes heladas en altura, lo que ayudará a que se pueda fabricar la deseada nieve de forma artificial.

Se acerca el mes más fuerte de la campaña, febrero, y la situación puede pasar de mala a catastrófica si no cambia y empieza a nevar. El consuelo que de momento queda es que, al caer Semana Santa en abril, la temporada es larga y, si se puede, se alargará hasta finales del citado mes.