Liga Asobal

El Bidasoa Irun se salió en el primer tiempo

El 2-0 a los 75 segundos era el presagio de lo que estaba por venir. El Bidasoa Irun fue una máquina letal en el primer tiempo, en gran parte gracias a la aportación de su portero Mehdi Harbaoui, que llegó al descanso con once paradas y un 55% de acierto. En el 8-4 del minuto 13 ya llevaba siete intervenciones y 64%. Son números que desmontan a cualquier rival.

El Puente Genil seguía cerca en el 6-4, una de las dos veces del primer tiempo en las que marcó dos goles consecutivos, pero hasta ahí llegó su resistencia. La mencionada actuación del portero franco-tunecino del Bidasoa Irun empezó a secar al equipo andaluz, que recibió un parcial de 4-0. Y no iba a ser el último. En el minuto veinte, posterior a la tarjeta roja que recibió el debutante Jakub Sladkowski por desplazar en el aire el visitante Aizen, llegó otra tacada idéntica y el equipo irundarra se fue nueve arriba, 16-7. En ese tramo Mehdi Harbaoui paró su segundo penalti de dos, lo que convirtió las anteriores tandas de aplausos en ovación, y al descanso se llegó con un último arreón amarillo para dejar el marcador en un significativo 19-9. El partido estaba visto para sentencia salvo sorpresa mayúscula.

Sorpresa que no se produjo ni se atisbó. Al poco de empezar el segundo tiempo el marcador mostraba ya doce goles de diferencia, 22-10, y a partir de ahí ya no hubo partido.

En el minuto 40, Cuétara sentó a Harbaoui y dio entrada a Skrzyniarz. Quizás el Puente Genil pensó que acababa su pesadilla, pero el ayer suplente incluso mejoró la prestación del titular. Parada en la primera acción, en la tercera, y parada tras parada hasta acumular diez en veinte minutos, 10 de 16, un 62% estratosférico. Y así siguió aumentando la ventaja hasta el definitivo 37-19.

Con nueve puntos de diez posibles y buenas o muy buenas actuaciones, el arranque de temporada de los bidasotarras está siendo sensacional. Mientras el resto de equipos de arriba ya han perdido una o varias veces, el conjunto guipuzcoano está mostrando solidez y fiabilidad. Lo único que se le puede pedir es que lo prolongue lo más posible. Próxima estación, Benidorm.