La incógnita del Valladolid pone a prueba al Juaristi Iraurgi

La sexta ola de la pandemia ha golpeado con fuerza y ha hecho que el Real Valladolid no haya podido jugar desde el 10 de diciembre. Es el que más partidos aplazados tiene pendientes por jugar, cuatro sumando el de hoy, y el rendimiento que va a tener la plantilla dirigida por Roberto González es una auténtica incógnita.

Por lo visto en los primeros dos meses de competición, la irregularidad define al rival, que ha sumado hasta ahora cinco victorias y seis derrotas. «Tiene una plantilla muy completa», ha valorado Iñaki Jiménez. «Pantzar y Wintering son dos bases 'top' y la línea exterior la completan muy bien con Berg, Geks y Kuidet, y por dentro está Sergio de la Fuente». El vitoriano jugó la temporada 2010/11 en el Iraurgi, es el alma del equipo y un jugador peligroso. Kuipers, Raffington y Pippen forman el juego interior.

Por parte del Juaristi, Ibon Guridi e Ierai Aizpitarte han vuelto a la dinámica de un grupo que puede conseguir la quinta victoria consecutiva en casa. Todos los triunfos conseguidos hasta ahora son en Azpeitia y la buena señal es que, incluso en las dos derrotas locales, los azpeiti-azkoitiarras estuvieron hasta el final con opciones de ganar. Todavía no está Ryan Nicholas, que se fue a finales de noviembre a los Estados Unidos para tramitar el visado y no ha podido volver desde entonces. «Se está convirtiendo en un problema muy complicado y largo», lamentó Jiménez, que estrenó paternidad la semana pasada.