El guipuzcoano de las 'Six Majors'

Hace cuatro años, se lanzó a la aventura y llegó a meta en Nueva York. Después terminó en Berlín, Boston, Chicago, Londres y, el pasado fin de semana, Patxi Galdós acabó el maratón de Tokio, completando de este modo las seis 'Majors'. O lo que es lo mismo, este legazpiarra afincado en Donostia desde su etapa como estudiante ha completado los seis maratones más importantes del mundo. Pocos pueden decir esto, y es por ello por lo que muestra orgulloso la medalla que acredita que ha terminado las seis.

«En la vida hay que marcarse objetivos», afirma este abogado de 65 años que forma parte de Donostiarrak, «un grupo de amigos a los que puedo considerar una familia». Ese reto particular que se marcó Patxi comenzó en equipo. «Fuimos ocho miembros de Donostiarrak hasta Nueva York con la idea de acabar los seis grandes maratones. Por diferentes circunstancias de la vida, he sido el primero de ellos en lograrlo».

Aunque, el gusto por correr carreras de 42,195 kilómetros se puede decir que le llegó hace ya una década, cuando, pasando unos días en Sevilla junto a un amigo y sus respectivas mujeres, le acompañó a completar un entrenamiento. «Él, casualmente, estaba preparando Nueva York. No podía dejar de entrenar. Yo siempre había hecho deporte, aunque de otra manera, y fui con él 50 minutos. Me encontré muy bien». Y le entró el gusanillo. «Me piqué».

Patxi acudió a Tokio, donde 38.000 corredores tomaron la salida, el fin de semana pasado. Lo hizo junto a su mujer Leire, quien le ha acompañado a los seis. Aprovechó para disfrutar de una ciudad en la que ya había estado antes «de forma diferente. Al final, cuando viajamos lejos, solemos estar unos días de vacaciones. Es una bonita excusa».

Se ejercita «cuatro veces a la semana, casi siempre en grupo» y su marca personal es de 3h16 –dos veces– en la Zurich Donostiako Maratoia. Y el mejor tiempo que ha logrado en una de las 'Six Majors' fue en la primera que acabó. «EnNueva York hice 3h17». Por supuesto, siempre que ha podido se ha sacado fotos con las estrellas de la distancia: Kipchoge, Bekele...

Para Galdós, pertenecer a un club como Donostiarrak es importante por «los valores. Somos una familia. Cuando el ser humano se hace mayor, suele aislarse poco a poco. Yo aconsejaría a todo el que pueda que haga deporte porque genera mucha felicidad. Se genera un vínculo. Yo veo la solidaridad y amistad gracias a este deporte».

A modo de anécdota que demuestra la amistad con sus compañeros, el corredor guipuzcoano, al que le encanta «fijarse retos, pequeñas zanahorias en el camino», cuenta lo que le ocurrió en Londres. «Fuimos cuatro de Donostiarrak. Reconozco que yo no había hecho los deberes previos. Los otros tres sí que los habían hecho.Salió un día de mucho calor y, ya en el octavo kilómetro, después de salir un poco más rápido de lo debido, 'peté'», cuenta.

Al poco tiempo, dio caza a Iñaki Lasa, uno de los hombres que viajó a la capital británica con él. «Me sorprendió porque yo iba muy mal y le había pillado. Se puso a mi lado. Ya en el kilómetro 22, cuando recuperé, me dijo que se había puesto a mi lado al verme tan mal. Fuimos juntos hasta meta. Eso me demostró muchísimo, porque renunció a la posibilidad de mejorar por ayudarme. Me llegó al alma».

Otra de las aventuras vividas en estos seis grandes maratones fue la semana pasada. «EnTokio, mi reloj marcaba que ya estaba cerca del kilómetro 42. De pronto, vi el cartel del 40... ¡Qué duro! Aunque conseguí darle la vuelta. De hecho, aunque el tiempo fue de 3h39, la segunda media la hice más rápido que la primera». Historias tiene mil para contar.

¿El próximo objetivo de Patxi? Praga. Y, claro, Donostia, que no es ni Nueva York, ni Boston, ni Chicago, ni Berlín, ni Londres, ni Tokio, pero es la de casa. Pero antes, este domingo, será voluntario en la Carrera de Primavera.