Beraun: de lo que era a lo que es y será
Los vecinos agradecen «los proyectos ejecutados, como la plaza Sarriegi, los que están en ejecución, la calle Beraun o los nuevos ascensores, y los que quedan por definir»
En el barrio de Beraun hay tres tipos de vecinos: los que han observado un largo recorrido con grandes cambios desde que eran críos, los que han visto mejorado el lugar desde hace unos años y finalmente los que han nacido hace poco o están en proyecto de, que ahora escuchan a diario las grúas pero que lo verán como un barrio moderno y con todo tipo de servicios dentro de muy poco.
Se desconoce si hay algún vecino del barrio que esté escribiendo un libro sobre la historia de Beraun, pero podría tomar perfectamente el titular escogido para este reportaje. 'De lo que era a lo que es y será'. En ello coinciden los seis miembros de la Junta de la Asociación de Vecinos de Beraun, que a día de hoy la única preocupación que tienen son «aquellos desperfectos puntuales como la rotura de una barandilla o una baldosa». De hecho afirman que «cuando tenemos pequeñas necesidades, hacemos una lista, vienen los de Urbanismo y lo arreglan todo». Están «satisfechos» de cómo les están dejando el barrio y cómo se lo van a dejar en el futuro.
Salvo alguna solicitud en mente a corto o medio plazo, se centran en los brotes verdes. El primer proyecto, el de la calle Beraun. «Nos va a favorecer mucho, con mejoras para el viandante y con nuevas plazas de aparcamientos», remarcan. «Cuando nos enseñaron el proyecto tenía buena pinta, con el fin de mejorar el bienestar y la calidad de vida de los ciudadanos. Va a quedar muy bien», aseguran.
«Estaría bien que la parada del urbano se trasladara a Aita Donostia y evitar así cruzar la carretera», solicitan
Continuando con otros trabajos en ejecución, se detienen con los ascensores que unirán las calles Maurice Ravel, Aita Donostia y Juan Crisóstomo. «Los veníamos pidiendo desde hace tiempo. Salimos beneficiados, principalmente las personas mayores y con movilidad reducida», agradecen. Sobre la mesa «había otra posibilidad, la de hacer un ascensor y una pasarela, pero finalmente se quedó en dos ascensores de unos dos metros cada uno», aclaran. También se alegran por «la instalación de las pantallas acústicas» en la carretera GI-20, trabajos que se prevén terminar para primavera.
La nueva plaza Sarriegi es sinónimo de «vida», según los vecinos. «Ahora hay ambiente, antes no había nadie. Ha mejorado muchísimo», exponen. Eso sí, aprovechan para solicitar «un baño cerca y vallas para que no se vayan los balones a la carretera, ya que conllevan un peligro para los niños».
Los diferentes miembros de la asociación también ponen en valor la nueva cubierta del campo de Beraun. «Habían cerrado la mitad y ahora está completo. Por ahí puede pasear mucha gente, incluso jubilados que van a hacer gimnasio...», sostienen.
Autobuses a los hospitales
Otra de las mejoras que tenían apuntada sobre la mesa era el bloque de pisos que se está construyendo en Esnabide Berri. «Ha pasado de ser una zona abandonada a tener ambiente», afirman. Asimismo festejan que «el antiguo parvulario en desuso vaya a utilizarse como oficina del Ayuntamiento y servicio de atención ZU!. Eso nos permitirá no tener que bajar hasta el centro».
Aun así, también apuntan algunos aspectos a tener en cuenta. Lamentan que «los sábados y domingos no haya autobuses para acudir a los hospitales. Hay muchas quejas de mayores porque si no te puede llevar un hijo, te tienes que buscar la vida». Hablando de autobuses, les gustaría que «la parada actual del urbano se trasladara a la calle Aita Donostia y así evitar que se cruce la carretera».
Por otra parte, solicitan como medida de seguridad «hacer un poco más alta la barandilla del puente que va a Bizarain. Los niños se suben y pueden ir de cabeza para abajo», confiesan.
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