Uno de los perros domésticos más antiguos de Europa vivió en el País Vasco
Uno de los más antiguos de Europa ·
El grupo de Biología Evolutiva Humana de la UPV/EHU determina que un hueso encontrado en la cueva de Erralla (Zestoa) corresponde a un ejemplar que vivió hace 17.000 añosJULIO ARRIETA
Lunes, 21 de noviembre 2022, 12:30
La domesticación del perro ha sido una cuestión objeto de debate entre los prehistoriadores desde que se planteó cuándo pudo darse este proceso y de qué manera se produjo. Para algunos, se trató de un proceso gradual que pudo iniciarse en fechas tan remotas como hace 30.000 años, mientras que para otros expertos se produjo en un lapso relativamente corto y más 'recientemente', entorno a hace unos 15.000 años, cuando ya hay restos óseos de esta especia claramente identificados. Ahora el equipo de Biología Evolutiva Humana de la Universidad del País Vasco (UPV/EHU), que dirige la profesora Conchi de la Rúa ha realizado un estudio de un húmero encontrado en la cueva guipuzcoana de Erralla y ha determinado que corresponde a un perro que vivió hace 17.000 años.
En las excavaciones dirigidas por el paleontólogo y arqueólogo Jesús Altuna en el yacimiento de Erralla (Zestoa) en 1977 - 1978 se encontró en un nivel correspondiente al Magdaleniense Inferior Cantábrico el húmero de un cánido, una familia de carnívoros que abarca lobos, perros, zorros y coyotes, entre otros, cuyos restos son tan parecidos que resulta complicado identificar y atribuir con certeza a una u otra de estas especies. En la correspondiente publicación (el artículo 'Bases de subsistencia de los pobladores de Erralla: Macromamíferos'. Munibe 37, 1985), Altuna y Koro Mariezkurrena apuntaron que este húmero podría pertenecer con mucha probabilidad a un ejemplar de 'Canis lupus familiaris', dato «que sería excepcional, dada la antigüedad del nivel establecida mediante la datación de una serie de huesos indeterminables de fauna (en torno a los 16.000 años)».
En aquel momento era difícil identificar a qué especie de cánido pertenecía el hueso de Erralla. Pero ahora, el equipo encabezado por Conchi de la Rúa lo ha logrado. El análisis morfológico, radiométrico y genético realizado ha permitido confirmar la identificación genética de la especie como 'Canis lupus familiaris', esto es, un perro doméstico. La datación directa del húmero «mediante carbono 14 analizado por espectrometria de masas con acelerador de partículas le otorga una antigüedad de 17.410 – 17.096 cal. BP, «abreviatura que corresponde a 'calibrated years before the present', es decir, que los resultados obtenidos se ajustan teniendo en cuenta los cambios en la concentración global de radiocarbono a través del tiempo». Esto significa que el perro de Erralla vivió en el periodo Magdaleniense del Paleolítico Superior, lo que le sitúa como «uno de los perros domésticos más antiguos existentes hasta el momento en Europa».
El ejemplar de Erralla, que debió de convivir con el grupo de cazadores recolectores que ocupaba esta cueva, comparte el linaje mitocondrial con los escasos perros magdalenienses analizados hasta ahora. El origen de este linaje se vincula a un periodo de clima frío coincidente con el último máximo glacial, que ocurrió en Europa hace unos 22.000 años. «Estos resultados plantean la posibilidad de que la domesticación del lobo se produjera antes de lo que se había propuesto hasta »ahora, al menos en Europa occidental, donde la interacción de los cazadores-recolectores paleolíticos con especies salvajes, como el lobo, pudo verse potenciada en las áreas de refugio glacial, como el Franco-Cantábrico, durante este periodo de crisis climática», explica.