Martin Zubimendi | Jugador de la Real Sociedad

«Me motiva más heredar el '4' de Asier Illarramendi que el '5' de Sergio Busquets»

El sol pega con fuerza en Las Rozas, un municipio al noroeste de Madrid que amanece tranquilo un domingo por la mañana. Apenas se cuentan unos pocos vecinos por la calle paseando al perro. Hay un lugar que concentra toda la atención. Un aparcamiento de grandes dimensiones se llena de vehículos en una hora. Se trata de Las Rozas Village, un centro comercial al aire libre que simula una pequeña aldea con calles pintorescas. Esta villa artificial no está compuesta de casas, sino de tiendas de grandes marcas de ropa, calzado y joyería, cuyos productos tienen atractivos descuentos. Este outlet se encuentra a menos de 500 metros del cuartel general de la selección española. Ahí lleva a cabo su preparación el combinado de Luis de la Fuente para afrontar la fase final de la Nations League. El jueves (20.45 horas) se mide a Italia en una de las semifinales del torneo. En el otro emparejamiento se ven las caras Países Bajos y Croacia. Hasta tres realistas integran la lista del técnico jarrero y el nombre de uno de ellos está en boca de todos: Martin Zubimendi.

- Es su segunda convocatoria con la selección absoluta, ¿cómo está transcurriendo su proceso de integración?

- Cada vez mejor. En la primera convocatoria de marzo todo era novedad para mí y entonces lo viví con más tensión. En esta segunda llamada ya he venido con esa experiencia que me dio la primera que me ha dado más tranquilidad. Estoy con ganas de demostrar el futbolista que soy y poder traer el título.

- ¿Le ha llamado algo la atención de lo que se ha encontrado? ¿Algún compañero que le haya causado sensación durante las sesiones de preparación?

- Los jugadores van cambiando en cada convocatoria y esta vez ha venido Jordi Alba que la última vez no vino. Creo que nos va a dar mucho y es uno de los jugadores que sí me han podido llegar a sorprender esta vez.

- ¿Los entrenamientos de Luis de la Fuente son tan exigentes como se decía que son los de Imanol?

- Son diferentes -ríe-. Imanol tiene todo el año para poder trabajar con nosotros, mide bien cuando nos puede meter caña y cuando no. Aquí son pocos días y tenemos que trabajar aspectos tácticos que generalmente no tenemos la oportunidad de practicarlos durante el año, por lo que se anteponen a los aspectos físicos.

- Conoce muy bien al seleccionador de su etapa en la Sub-21 con el que llegó a colgarse la medalla de plata en los Juegos Olímpicos de Tokio.

- Solo tengo palabras de agradecimiento hacia él. Desde que llegué a la Sub-21 me dio toda la confianza del mundo, enseguida me puso a jugar de titular incluso. Por este camino que ya hemos andado juntos en los últimos años estoy contento de poder coincidir aquí también con la absoluta con él.

- ¿Qué instrucciones le transmite para actuar en el centro del campo?

- Tengo la suerte de que el estilo de juego de la selección es bastante parecido al de la Real Sociedad. Aquí intento mostrar lo que vengo haciendo normalmente en casa con Imanol. Eso sí, hay diferentes matices y eso me obliga a cambiar algunos detalles, pero las bases son bastante parecidas.

- Los aficionados de la Real le veían en condición de acudir a la selección desde hace tiempo, pero con Luis Enrique no pudo ser y se perdió el Mundial. ¿Ha sido una liberación poder alcanzar la absoluta de una vez por todas?

- Siempre he tenido ese objetivo, pero era consciente de que había gente muy buena por delante en mi demarcación. Teniendo a Rodri y Sergio Busquets no podías prescindir de ninguno de ellos y no creo que fuera la mejor idea llevar a tres jugadores para ese mismo puesto. La retirada de Busquets ha sido clave en ese sentido para que se pudiera liberar una plaza y de momento la estoy aprovechando yo.

- ¿Cómo ve personalmente la situación de la selección? ¿Se encuentra en un momento de transición o de construcción con tantos cambios?

- Cada vez que termina un torneo importante como es un Mundial siempre hay momentos de transición, aunque yo diría más que nos encontramos en uno de evolución. Las bases siempre han estado bien puestas y hay que ir cambiando matices que ya solo con el hecho del cambio del entrenador te los da.

- Da igual en el estado en el que se encuentren que el jueves tienen a un rival como Italia que no va a hacer prisioneros.

- Tengo la experiencia de haber jugado esta temporada contra la Roma en la Europa League y que por desgracia nos mandaron a casa. Otra cosa no, pero ahí demostraron que son competitivos como nadie. Es una selección muy dura para estas semifinales de la Nations League.

- ¿Busca entonces su particular 'vendetta' después de aquella eliminación?

- Sí, además habrá varios jugadores con los que nos enfrentamos aquellos días en el Olímpico y en Reale Arena, así que sí, puede ser un buen día para vengar esa derrota.

- Entiendo que tiene muchas ganas de debutar, pero delante hay un compañero -Rodri- que viene de marcar el gol decisivo en la final de la Champions League, ni más ni menos.

- Sí, tengo muchas ganas de demostrar, de jugar y de disfrutar sobre el campo, pero siempre siendo consciente de la dificultad que hay de hacerlo, por la pieza que tengo delante. A todos nos toca aceptar nuestro rol y desde ahí intentaré dar todo lo que pueda.

- ¿Qué destacaría de él y qué características suyas le gustaría adoptar a su juego?

- Rodri es un referente para los mediocentros españoles. Es un jugador con mucha presencia, muy seguro con el balón y que realiza ayudas constantemente en el campo. Son las bases que todo centrocampista tiene que tener interiorizadas y él las tiene muy pulidas.

- Hereda el dorsal 5 de Busquets. ¿Lo ha pedido o se lo ha dado el seleccionador? ¿Cómo ha sido la historia?

- Es fácil. En la selección cuantos más partidos lleves más derechos tienes para elegir un dorsal. Quedaban muy pocos libres cuando me tocó elegir a mí y yo me quedé con el 4. Lo que ocurrió es que al venir Nacho en el último instante él escogió finalmente el que yo quería por tener más partidos y a mí me tocó finalmente coger el 5, porque era el que había dejado libre David García. Fue así de sencillo. Justo coincide con el número que había dejado Busquets y ni mucho menos le hago ascos, porque él ha sido un referente.

- La gente enseguida se puso nerviosa al ver que cogía ese dorsal, por la connotación que tiene con relación al Barcelona. Tranquilidad, ¿no?

- Sí, ha sido casualidad pura y dura, pero sí que es verdad que me motiva llevar ese dorsal que llevaba él.

- ¿Qué le motiva más llevar el '5' de Busquets o el '4' de Asier Illarramendi?

- El 4, porque es el número que personalmente siempre me ha gustado más, lo he llevado desde pequeño, así que me quedo con el 4.

- Ese acto que se vivió en el centro del campo al término del partido contra el Sevilla en el que Illarramendi le hace entrega de la camiseta con su dorsal alivió a muchos aficionados.

- Más allá de ese gesto no hacía falta demostrar nada, siempre he dicho que mi idea era continuar. Fue una sorpresa muy bonita por parte del club y de Illarra recibir el número de sus manos delante de mi gente. Fue un gesto bonito que lo agradezco.

- ¿No estaba al corriente de lo que iba a suceder?

- En el calentamiento me avisaron que iban a hacer un acto y la verdad es que fue muy bonito.

- Olabe dijo en su comparecencia ante los medios que preveía un verano largo en referencia a los clubes que pueden venir a llamar a su puerta o a la de otros jugadores como Merino. ¿Usted también lo ve así?

- Espero que no, por mi parte y por la de todos mis compañeros. Creo que hemos construido un bloque muy unido y fuerte y si nos quedamos todos podemos dar la talla en la Champions. Sería bonito que la mayoría de nosotros continuáramos el año que viene.

- ¿Está cansado de contestar siempre a las mismas preguntas alrededor de su futuro?

- No he hecho muchas entrevistas este año porque si tienes algún desliz te lo sacan en el titular. A veces puede haber malinterpretaciones y ese ruido que se crea con esas entrevistas hace que no me sienta muy cómodo luego. He intentado a hacer las menos posibles, pero es algo que viene con la profesión.

- Hamari Traoré es el primer refuerzo del mercado y da la sensación que la dirección deportiva quiere armar un buen equipo para la Champions.

- El equipo va en una línea ascendente y eso conlleva también nuevos objetivos, nuevas dificultades y los fichajes tienen que acabar llegando. Por lo que he visto es un jugador con experiencia, con mucha carrera en Francia, un líder en su equipo, así que a priori nos va a venir bien.

- ¿El sábado cuando vio la final de Champions ya se percató de que va a tomar parte de esa competición? ¿Lo comentó con Merino y Le Normand?

- Lo vimos todos en el comedor y fue un partido bonito. Sí comentamos que el año que viene vamos a estar ahí. Tenemos ganas de competir en la fase de grupos y dar nuestra mejor imagen.

- ¿Cómo está siendo la convivencia aquí con tantos compañeros de Zubieta? Se ve mucho txuri-urdin en Las Rozas sumando a los que están con la Sub-21 (Barrenetxea y Pacheco).

- Eso significa que hemos hecho una muy buena temporada. Cuantos más jugadores vengamos, mejor. Además, a mí me viene bien en esta adaptación poder contar con compañeros como Mikel Merino, que ya tiene experiencia y te facilita todo mucho más.

- ¿En el vestuario les han felicitado por ese cuarto puesto? ¿Les han reconocido la buena temporada que han realizado?

- Sí, es inevitable hablar de la temporada de los demás. Muchos juegan en nuestra Liga y hemos comentado aspectos y entre otras cuestiones nos han trasladado que tenemos un equipazo y hemos hecho una muy buena temporada. Se agradecen estos reconocimientos porque estamos haciendo unas buenas temporadas y la Champions es la guinda de este proceso que llevamos.

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