Errenteria

No están solos en esta batalla

En cada rincón de Errenteria no se habla de otra cosa que del Touring y su futuro en Tercera RFEF. El primer equipo ascendió en 2022 a la quinta categoría del fútbol estatal veintitrés años después y llegados a este punto, a falta de cinco jornadas, se juega la vida.

Reunidos por este periódico en el terreno de juego de Fanderia en una semana «clave», los socios más longevos, así como aficionados, jugadores de otras categorías, figuras relacionadas con el club y patrocinadores, les han transmitido su apoyo y confianza a los cuatro capitanes del primer equipo. «No estáis solos en esta batalla», les recordaron antes y después de una foto que representa a la perfección lo que es un club centenario como el Touring Kirol Elkartea: una familia.

Restan cinco partidos y en juego quince puntos que definirán dónde merece estar el equipo la temporada que viene. El futuro no se puede predecir, pero si nos ceñimos a las sensaciones de las últimas semanas –en un mes ha ganado tres de cuatro partidos, mismo número de triunfos que había logrado desde septiembre– puede haber fiesta. Y sería redonda, más si cabe en estos tiempos.

La primera de las cinco finales es hoy, en Fanderia, a las 16.30 horas. Ante el Aurrera de Vitoria, matemáticamente descendido. Un envite catalogado por la masa rojilla como «algo más que vital». Ganar significaría casi seguro salir del descenso cinco meses después y afrontar los últimos cuatro dependiendo de sí mismo; empatar o perder, al contrario, un mazazo incontestable.

A los capitanes Gorka Güemes, Mikel Gallego, Unai Mitxelena y Endika Tarragona –faltaba Mikel Benito que no pudo asistir– se les encendieron los ojos nada más ver pasar por la puerta a José Olkotz, Marcela Ruiz de Gino, Julito Beldarrain o Carlos Iglesias. Sin ellos, probablemente no se puede entender el Touring. «Lo tenemos que hacer por ellos», coincidían los capitanes mientras saludaban a las figuras más longevas del club.

Olkotz, socio número 1, cumplirá 78 años como socio en septiembre. No falló en el primer partido que jugó el Touring ante el Vasconia en Lartzabal. De hecho dejó de ir a la misa mayor por ver a los rojillos. «Me costó un castigo», recuerda de entonces. Llegó a ser director de la escuela y se emocionó al ver a su nieto Beñat Garro cuando jugó con gorro por una enfermedad. «Jugó 60 minutos, terminó doblado y salió ovacionado. Ese día es el que más he llorado», confiesa aún emocionado. Al primer equipo actual le ve «con opciones de salvarse», confía, siendo consciente de que el partido de este sábado «hay que ganarlo sí o sí y que los demás rivales directos no puntúen». Lamenta que el Touring, «uno de los equipos punteros de Gipuzkoa», haya estado a un paso de San Sebastián. «Eso quita mucho», afirma. Se dio de baja como socio de la Real, pero «jamás» del Touring.

El socio número 2 es Carlos Iglesias, quien ya tenía carné «a los 12 días de nacer». Rememora la trayectoria del club, incluso de cuando salió él en una foto de un partido en Lartzabal. «Hubo un tiempo que llegamos a tener la mejor media de Euskadi con Zapirain y Otaegi, y hemos tenido el mejor portero de Tercera: Álvarez», recuerda. Sobre el plantel actual de Tercera cree que «se puede salvar siempre y cuando no se vayan de aquí los puntos». No le gustan las cuentas de la lechera, pero piensa que «ganando los dos que quedan en casa nos vamos a salvar». Echaría el tiempo atrás para «volver a disfrutar de ese gran ambiente en Lartzabal. Ahora todo ha cambiado, es más frío», subraya.

Pero si por algo debería sumar este sábado el Touring de tres es por personas como Marcela Ruiz de Gino, que con 96 años no deja de venir a Fanderia partido sí partido también, sea en Tercera o en Regionales. «Antes íbamos a Villafranca a verle en el tren y luego andando a Beasain...», recuerda la socia que lleva desde el 47 y siguió la andadura del equipo en Segunda B en el 93/94. Ahora disfruta del centenario del club y agradece emocionada «el detalle del presidente Yerobi el día de mi cumpleaños, que vino con un ramo de flores a una sociedad». Confía plenamente en los rojillos. «En los últimos partidos les he visto mejor», observa, declarando que «claro que lo pueden hacer. Vamos a estar con ellos», sostiene.

A su lado se acerca Beldarrain, el gran héroe del 75 que dio la Copa de Gipuzkoa metiendo el último gol de la victoria contra el Aurrera de Ondarroa en Atotxa. Socio desde que empezó a jugar con 10 años ha sido jugador, entrenador y siempre lo dio todo por su club, el Touring. Supone un «orgullo» verle cumplir cien años y está «ilusionado» por que el equipo salve la categoría. «Han dado pasos grandes con las dos últimas victorias, tenemos que seguir así», confía Julito.

Una vez escuchada la voz de la afición, toca la del jugador. Los capitanes confiesan que de puertas para adentro el vestuario es «optimista» y está «enchufado». Mitxelena recuerda que «vamos a ir a muerte cada partido», Gallego expone que «le vamos a dar caña para mantenernos», Tarragona indica que el de este sábado es un «partido para que no se nos escape sin mirar otros resultados» y Güemes lo tiene claro. «Es el partido más importante de la temporada y necesitamos a la afición, son indispensables. Esto lo tenemos que sacar adelante entre todos», declara con confianza.

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