El caserío es un libro abierto

Pasear entre manzanos y kiwis disfrutando de un hermoso paisaje. Descubrir los aromas de los frutos, disfrutar del contraste de colores o conocer su proceso de recogida a mano. Son algunas de las opciones que propone el sindicato agrario ENBA en la quinta edición del Ongi Etorri Baserrira. Quienes se animen a participar en una de las numerosas visitas propuestas a caseríos guipuzcoanos y vizcaínos también podrán aprender los pormenores del proceso de ordeño de las vacas antes de que consumamos la leche en nuestras casas, conocer de primera mano los secretos de la elaboración de un queso de oveja ecológico o ver cómo se trabaja con la carne de vacuno.

En esta edición, los baserritarras que participan en el programa Ongi Etorri Baserrira abrirán las puertas de sus casas y explotaciones los días 5 y 6 de julio. Para inscribirse solo es necesario llamar al número de teléfono 943 65 01 23. La información de todas las visitas se encuentra en www.ongietorribaserrira.eus. Son gratuitas.

Un tranquilo paseo de alrededor de un kilómetro adentrará a los visitantes que se acerquen al caserío Unanue Zar, de Donostia, por un extenso manzanal con unos 8.000 árboles que lucirán sus frutos, mientras Antton Olaizola les explica los pormenores de su producción. El productor dará las pistas para poder descubrir los secretos que nos permitirán distinguir una buena manzana, ácida, roja del tipo Elstar o Topaz, sabiendo los parámetros que tienen en cuenta para lograr el mejor momento de recolección, el punto óptimo de maduración con un buen nivel de azúcar y un buen sabor... Todo un laborioso proceso al que se suma el de recolección manual porque, como explica Antton, «recogemos cada manzana a mano. Las colocamos en la caja y lo principal es que no toque el suelo, ya que cualquier golpe daña la fruta y después no se puede vender. Todo este trabajo exige mucha dedicación y llama la atención de la gente». Para el productor lo importante de las visitas es dar a conocer su trabajo y el valor del producto que después comercializan.

Olaizola cuenta que «somos pequeños productores y apostamos por la calidad de nuestra fruta». Manzanas y kiwis que se venden en numerosos supermercados, pero también en la tienda que Antton tiene en su almacén de Añorga o a través de la web lurralde.eus.

Arantxa Arruabarrena, del caserío Oihanalde, de Irun, asegura que «la relación física con nuestros cliente es muy importante. Cuando enseñas cómo trabajas, la relación que surge es diferente. Poder vernos la cara cambia totalmente el trato con el posible cliente, que se interesa por tu producto y tiene la oportunidad de preguntar todo aquello que le despierta interés, sobre todo a la gente joven con niños».

«En las visitas a nuestro caserío les explicamos todo el proceso de engorde de nuestras vacas y terneros. En la sala de despiece se les enseña ese proceso junto a los lotes envasados y se les explica las características de nuestra carne, que ahora además de contar con el sello de Eusko Label, hemos logrado el certificado ecológico». Algo que despierta gran interés entre los visitantes que se acercan al caserío Oihanalde, situado en el barrio Olaberria de Irun y en el que Arantxa junto a su marido Felix Ugarte cría unas 200 cabezas de ganado vacuno de la raza Aberdeen Angus. «Es una carne muy jugosa y de un sabor muy bueno. Está gustando mucho entre nuestros clientes», asegura la baserritarra.

«Después, les enseñamos el ganado, que en estos momentos pasta en la zona de Aiako Harria. Vamos hasta allí y ven a nuestros animales en ese entorno natural en el que se alimentan los meses de primavera, verano y comienzos de otoño mientras el tiempo respete».

Un nutrido rebaño de ovejas pasta en los terrenos cercanos al caserío Lamariano Azpikoa de An-tzuola. Txomin Alberdi se encarga de su cuidado y ordeño, mientras Amaia Laskurain elabora los quesos ecológicos de Ama-Txo gaztandegia. Desde que se embarcaran en la aventura de tener su propia explotación, los dos jóvenes antzuolarras trabajan duro para buscar un espacio en el mercado y hacer frente a su nuevo estilo de vida. Con la apertura de las puertas de su caserío, Amaia y Txomin quieren que la gente conozca el proceso de elaboración o deguste el sabor característico de su queso y, además, compartir la historia que rodea a Ama-Txo gaztandegia. «Se trata de un queso con un sabor diferente, peculiar que como cualquier otro queso te tiene que gustar. Lo mejor es venir y probarlo».

Txomin asegura que los visitantes que se acerquen hasta su caserío en Antzuola podrán conocer en primera persona el quehacer diario que rodea a la elaboración del queso o el manejo del rebaño, desde su alimentación hasta la salida de las ovejas hasta un prado cercano. «No es la mejor época para ver los corderos, pero esa es una de las experiencias más divertidas para los más pequeños». Alberdi quiere que los visitantes conozcan las características de las ovejas 'latxas' y la exigencia de ofrecer un buen cuidado de estos animales.

En el caserío Arramendi, de Ordizia, abrirán este año las puertas a la iniciativa Ongi Etorri Baserrira', aunque no será la primera vez que tengan visitantes en sus instalaciones. Joserramon Arsuaga reconoce que «hemos recibido a grupos de chavales anteriormente» y aunque ahora serán grupos más variados, el ordiazarra considera que las jornadas de puertas abiertas de ENBA «nos sirven para mostrar nuestro trabajo a grandes y pequeños. Los chavales creen que la leche es algo que se compra en el supermercado. Muchos no saben de dónde sale, ni siquiera han visto una vaca... Cuando les explicamos el proceso o ven que la leche sale de las ubres de las vacas se sorprenden. Es algo totalmente nuevo y sorprendente para muchos chavales». Por ello, «queremos que los niños y los adultos también descubran la vida de los caseríos y el trabajo que realizan en ellos los baserritarras».

Arsuaga explicará el proceso que sigue la leche desde el ordeño al traslado a las instalaciones de Kaiku Kooperatiba Elkartea. Sin olvidar temas como los controles de calidad de la leche, de sanidad y otros muchos detalles que se deben cumplir para su consumo.

Estas son cuatro de las muchas experiencias interesantes que ha propuesto ENBA esta quinta edición de Ongi Etorri Baserrira, en la que los baserritarras quieren acercar la vida laboral de sus explotaciones ganaderas o agrícolas. Un mundo por descubrir para todos aquellos que, inmersos en la rutina diaria de las prisas y el trabajo, desconocen una realidad más cercana de lo que creen.

La cita es el viernes y el sábado de la semana que viene.