Borrar
La industria, a pesar de los cuellos de botella y la falta de suministros, ha sido uno de los sectores estrella en 2021. Impulso que se espera continúe en este 2022. DV

2022: cautela y fortaleza a partes iguales

Crecimiento ·

Tras un 2020 que fue el de la 'resistencia' y un 2021 que debía ser el de la gran remontada, la incertidumbre planea sobre la economía vasca, que se dispone a tomar velocidad de crucero

Julio Díaz de Alda

San Sebastián

Lunes, 3 de enero 2022, 06:43

Comenta

Si alguna lección en el plano económico nos ha dejado esta pandemia de Covid contra la que aún luchamos, en una batalla en la que las vacunas han supuesto afortunadamente un verdadero punto de inflexión, es que, nos guste o no, la incertidumbre se ha configurado como el eje sobre el que todo (o casi todo) gira. Y es que, sea por una cosa o por otra, el virus y sus derivadas, en un mundo que se ha demostrado más global e interconectado que nunca, no han dejado de poner palos en las ruedas o, al menos, ciertos frenos en esa remontada que descontábamos en 2021 y que no ha terminado de explotar. Tras el terrible desplome de 2020, inédito desde la II Guerra Mundial, el año pasado sirvió para recuperar la esperanza (que hoy sigue intacta) y buena parte de la actividad hasta que la ruptura de algunas cadenas de suministro, los elevados costes energéticos (que continúan) y las nuevas olas del virus (con la variante Ómicron como protagonista) enfriaron la remontada. En realidad, solo la pospusieron un tiempo, pues hoy, con lo peor de la crisis ya superado y la vista puesta en este recién estrenado 2022, las previsiones dejan entrever un crecimiento de la economía de Euskadi notable, superior incluso al de la media europea, que permite pensar en recuperar por fin toda la riqueza perdida por el zarpazo del virus. De hecho, en algunos aspectos, como el del empleo, los datos ya invitan a ser más optimistas. El consenso pasa por un primer semestre aún incierto, para alcanzar una cierta velocidad de crucero en la segunda mitad del año que afiance la vuelta a los niveles precovid. Eso si, todas las alarmas permanecen encendidas, sobre todo en algunos sectores; y es que los riesgos están ahí y las amenazas que debían haberse desvanecido continúan.

Producto Interior Bruto

Las previsiones pasan por un alza en el entorno del 6%

Otra de las enseñanzas aprendidas es que las previsiones económicas sirven casi únicamente para el día en que se publican. En cualquier caso, y tomando como referencia el 6,7% que estima el Gobierno Vasco para 2022, el 6% del Servicio de Estudios de Laboral Kutxa y el 5,9% que prevé Confebask, lo cierto es que el consenso se mueve en esa horquilla. En realidad, no resulta tan importante el número sino la tendencia y las 'tripas' del PIB. Y es que si en 2021 ha sido la industria la que, a pesar de todo y con mucho mérito, ha tirado del carro, ahora debiera de ser la hora del consumo y la inversión, tanto públicos (ahí deberían jugar su papel los fondos europeos) como privados. Hay enormes cantidades embalsadas de dinero ahorrado durante la pandemia –al que por cierto la inflación está arañando valor–, y se espera que superada esta sexta ola y recuperada cierta normalidad en sectores como los servicios o el ocio la 'alegría' regrese de una vez por todas. El sector exterior (el juego entre exportación e importación) ha mostrado en Euskadi un magnífico desempeño en 2021, que ahora se espera sea aún más relevante.

Cuellos de botella

Todas las miradas puestas en las cadenas de suministro

La recuperación vivida en el segundo trimestre de 2020, que nos permitió aferranos al optimismo, se vio alterada por un efecto colateral (y en cierto modo perverso) de la pandemia como fue la ruptura de la cadena de suministros. Mucha demanda en la vuelta a la actividad y poca oferta (en algunos casos controlada por ciertos oligopolios globales) dejaron al mundo sin chips, sin materias primas y con unos precios del transporte alocados. Ahora, los analistas, que de semana en semana han de revisar sus estimaciones anteriores al perdurar este lastre más de lo que previsto, coinciden en que la marejada camina a hacia su fin, aunque queden algunos meses de aguas turbulentas. El problema es que el repunte de la inflación (en el que la mitad de la culpa la tiene la energía) y la eterna incertidumbre tienen en vilo a no pocos sectores. En Euskadi, la automoción (tan importante en empleo pero también en posibilidades de futuro, y que se enfrenta además a su propia revolución) o la aeronáutica, y sus muchas empresas auxiliares, aún padecen y van a padecer un tiempo. Eso, por no mencionar las paradas de producción en las fábricas de coches a la espera de los ansiados componentes. Por eso parece esencial mantener los programas de ayudas vigentes y, si es caso, desarrollar otros nuevos 'ad hoc'. Al tiempo, la economía en general reclama a voz en grito acelerar y agilizar al máximo los PERTE y los proyectos planteados al calor de los fondos 'Next Generation', que adolecen por ahora de cierta 'somnolencia'.

Energía

Cuando la geopolítica impacta en fábricas y hogares

En lo que respecta a la energía, y a su impacto derivado en el IPC, las perspectivas no están claras, pues a pesar de las medidas dispuestas desde el Gobierno central, que resultan un alivio parcial y limitado a ciertos consumidores, sobre todo domésticos y vulnerables, el problema encuentra su origen en cuestiones geopolíticas de difícil manejo local. El KWh sube porque sube el precio del gas, y eso queda en manos más de Moscú o Argel que de Bruselas. Además, la Unión Europea no ha querido entrar al trapo cuando desde España se le ha solicitado 'meter mano' al sistema marginalista de precios. En este aspecto, las industrias electrointensivas (con notable presencia y peso en el País Vasco) son las más perjudicadas. Sin embargo, el peligro va más allá, y el conjunto de las empresas no deja de recordar que costes al alza y márgenes a la baja no auguran nada bueno.

Empleo

Se espera superar este año el millón de afiliados en Euskadi

El 'manguerazo' de dinero dedicado a sostener la economía (créditos ICO y Elkargi, aplazamientos de pago de obligaciones con la Administración, ayudas directas, paréntesis en la obligación de presentar concursos de acreedores o los ERTE), así como una rápida vuelta a la actividad tras los confinamientos, han permitido que el empleo se presente, prácticamente, como la única luz en la niebla. Eso ha hecho que, por ejemplo, Gipuzkoa haya recuperado ya el número de afiliados que tenía antes del Covid. El Gobierno Vasco calcula que en 2022 unas 11.500 personas encontrarán empleo en Euskadi. Confebask, por su parte, va más allá y estima que habrá 25.000 afiliados más, lo que llevará el número total de ocupados por encima del millón, un récord histórico.

Salarios

Un IPC desatado se cuela en la negociación salarial

Es una de las 'patatas calientes' que hay encima de la mesa. Y no parece sencilla de resolver. Y es que con casi la mitad de los asalariados en Euskadi con su convenio decaído o prorrogado, y con una inflación desatada por el encarecimiento de la energía, la cuestión de la actualización de los salarios se presenta peliaguda. Los sindicatos vascos ya han dicho que harán de este asunto 'casus belli', y que no cederán para que las plantillas mantengan su poder de compra. Y las organizaciones empresariales, por su parte, han expuesto que semejante subida de los costes fijos, unida a las de las materias primas o la energía, se llevará por delante a muchos. Adegi ha sugerido negociar en cada empresa para repartir el impacto en varios ejercicios.

LAS CIFRAS

  • 6,7% es lo que prevé el Gobierno Vasco que crecerá el PIB en 2022, por encima del 5,9% de Confebask o el 6% de Laboral Kutxa.

  • 25.000 empleos crearía Euskadi en 2022, según la patronal, que estima que a cierre de año los afiliados superarán el millón.

  • 6,7% es el dato provisional de la inflación de diciembre, doce décimas más que en noviembre (5, 5%) y la cifra más alta en 29 años.

Este contenido es exclusivo para suscriptores

Publicidad

Publicidad

Esta funcionalidad es exclusiva para suscriptores.

Reporta un error en esta noticia

* Campos obligatorios

diariovasco 2022: cautela y fortaleza a partes iguales

2022: cautela y fortaleza a partes iguales