Las últimas horas de Mario Biondo
La noche que murió, el marido de Raquel Sánchez Silva 'wasapeó' con ella. Luego salió a la calle, donde sacó 110 euros de un cajero para tomarse unas copas
ESTER REQUENA
Miércoles, 16 de octubre 2013, 10:21
Cinco meses después de la muerte de Mario Biondo, se siguen conociendo más datos de las últimas horas del cámara de televisión. Incluso ha trascendido el minuto a minuto de la vida del marido de Raquel Sánchez Silva en tan fatídica noche gracias a testigos e informes policiales. Lo más curioso: Biondo visitó un burdel en el que se tomó tres copas, según figura en los cargos de su tarjeta de crédito, y donde, al parecer, no hay constancia de que solicitara otros servicios. Eso sí, estuvo viendo pornografía en su ordenador, de ahí los pañuelos que encontraron impregnados de restos biológicos junto al cadáver, según publicó ayer la web 'Vanitatis'
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La tarde comenzó con una pequeña discusión del matrimonio. Tras el encontronazo, la presentadora dejó al cámara solo en casa. Tenía previsto un viaje a Plasencia que había planificado con anterioridad. Aun así, estuvieron gran parte de la noche mensajeándose por el móvil y terminaron la conversación con un 'te quiero'. Biondo también aprovechó sus conexiones a internet para hablar con sus hermanos sobre sus proyectos futuros tras 'Masterchef' e incluso se acercó a sacar 110 euros de un cajero. La Policía no encontró el dinero, por lo que se especula con que lo destinase a cocaína, sustancia que junto con alcohol apareció en el informe toxicológico, según hizo público hace unos días su familia.
Los Biondo luchan con empeño para que no se archive el caso como suicidio, convencidos de que se trató de un homicidio. Y eso mientras no paran de lanzar 'tiritos' a su ahora viuda. La guerra se inició solo unas semanas después de la muerte del cámara, cuando acusaron a la presentadora de moverse solo por dinero y de que incluso habría podido manipular alguna prueba ella misma o a través de su asistenta, que fue la que halló el cadáver.
Por su parte, Sánchez Silva sigue manteniendo un silencio absoluto sobre el tema tras comentar que su marido «quería vivir». Desde entonces, solo ha trascendido su rechazo a la parte de la herencia que le podría corresponder. Ha hecho oídos sordos a las críticas de su familia política, centrándose de nuevo en su carrera televisiva.
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