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AGENCIAS
Viernes, 30 de diciembre 2011, 10:26
Una mujer fue hallada muerta en su domicilio del barrio sevillano de Bellavista. La víctima, de 53 años, apareció degollada y atada en una cama. La Policía detuvo ayer noche en el barrio del Polígono Sur de Sevilla a una mujer de 51 años, de la que no facilitó su identidad, cuyos datos coinciden con los de la compañera de la fallecida, con la que mantenía una tormentosa relación.
La víctima fue localizada después de que sus compañeras de trabajo alertaran a una sobrina suya de que llevaba varios días sin acudir a su puesto de limpiadora. Todo apunta a que la autora del crimen podría ser la detenida, con la que la víctima mantenía una relación desde hace años. Ambas residían en unos bloques de viviendas de la urbanización Nueva Bellavista, donde también vive la sobrina.
La Brigada de Homicidios del Cuerpo Nacional de Policía se ha hecho cargo de las investigaciones, de las que hasta el momento no han trascendido más datos debido a que se ha decretado el secreto del sumario. Agentes de la policía científica tomaron muestras en la vivienda y extrajeron varias cajas de cartón con diverso material, entre el que estaban las sábanas de la cama en la que fue localizada la fallecida.
Constantes discusiones
Los vecinos aseguraron que en la vivienda había constantes discusiones entre la fallecida y su pareja. Susana Rodríguez, que vive en el piso de abajo de la pareja, explicó que ambas mujeres «se peleaban brutalmente a diario», por lo que en varias ocasiones les tuvo que llamar la atención porque su hijo pequeño «se asustaba con los gritos y los porrazos horrorosos» que se escuchaban.
La misma vecina, que lleva tres años viviendo en esa casa, en una primera planta, añadió que el día de Nochebuena las dos mujeres estuvieron «todo el día peleando», y apuntó que a partir de aquella noche ya no oyeron más gritos. Relató que desde entonces las persianas habían permanecido bajadas, lo que le extrañó, aunque lo atribuyó a que se habían ido de viaje.
Según esta vecina, la víctima, conocida como Chari N., llevaba unos 18 años en dicha vivienda, mientras que su pareja se habría incorporado hace «uno o dos años».
Otros vecinos afirmaron que el pasado lunes vieron por el barrio a la compañera de la asesinada, a la que no se le conoce un empleo, y desde entonces «nadie ha vuelto a saber nada más de ella».
El vecino de la casa de al lado de la fallecida, José Manuel Santana, por su parte, también apuntó que las discusiones entre ambas mujeres eran frecuentes. Este hombre agregó que la mujer muerta era «una persona trabajadora», y apuntó que en torno a las dos de la madrugada de la Nochebuena fue la última vez que escuchó a las mujeres.
Por otro lado, el Juzgado de Primera Instancia e Instrucción 1 de la localidad sevillana de Marchena ordenó ayer el ingreso en prisión provisional, comunicada y sin fianza de Fernando F.G., de 35 años, por el presunto asesinato de su expareja Inmaculada D.R., de 29, cometido el martes.
El juez le imputa un delito de asesinato, otro de tentativa de homicidio por agredir a la pareja de la mujer y un delito de quebrantamiento de condena, según informó el Tribunal Superior de Justicia de Andalucía (TSJA) en un comunicado.
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