Zerkausi kalea
FRANCISCO ATONDO
Lunes, 30 de junio 2025, 20:21
Dos de los edificios con mayor belleza de Tolosa son los que delimitan el comienzo y el final de Zerkausi kalea. En el número 8 ... de la calle, esquina con Korreo, el arquitecto tolosarra Guillermo Eizaguirre, proyectó en 1930 la preciosa casa que hoy podemos admirar, con dos bloques de miradores maravillosos en chaflán. La singular construcción, en palabras de quien la proyectó, tenía que ir en concordancia con los gustos del momento, en un relativo estilo historicista con algunos elementos de la arquitectura vernácula del pasado, pero siempre encuadrado en la corriente moderna iniciada por los grandes creadores que llenaron ciudades como Barcelona de piezas urbanas de gran calidad. Haciendo ángulo con Plaza Zaharra, la piedra arenisca de los números 1 y 2 proclama el gusto y calidad con los que fueron edificados. El acertado pavimento de la calle, y el resto de los edificios, componen un mosaico cromático de gran fuerza estética. La casa de Isaac López Mendizabal es otra de las piezas destacadas del conjunto monumental de la calle.
En principio se llamó Solana por ser la más soleada del pueblo, y luego fue 'Conde de Ibar' en recuerdo de Eugenio de Insausti, conde viudo de Ibar, mecenas en la construcción de la Casa de Beneficencia, actual Residencia Yurreamendi, sobre los terrenos cedidos por Miguel Muñoa. En el último tercio de siglo, volvió al nombre de Solana. Hoy la conocemos como Zerkausi kalea, en honor del Tinglado, edificado tras la demolición de la muralla (Zerka Hausi). En la actualidad, la vieja Solana es destino frecuentado de asueto y en los ratos gratificantes del atardecer, las escaleras del tinglado se convierten en tranquilo graderío, en el que con la copa en la mano, los tolosarras disfrutan de los buenos momentos del día.
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