El Ayuntamiento inicia los trámites para construir una rotonda en Olarrain

En el reciente Pleno de presupuestos, el grupo municipal de EH Bildu lanzó una propuesta concreta en torno a esta área de la villa. Incluso solicitó que se reservara una partida de 60.000 euros para empezar a acometer este proyecto. La coalición abertzale propuso, concretamente, que el Ayuntamiento iniciase las gestiones para que la Diputación incluyese el proyecto de la rotonda en su plan de infraestructuras del año 2019. Y, mientras tanto, durante el 2018, que el propio consistorio impulsase una intervención municipal para mejorar la zona y garantizar la seguridad de los peatones.

La concejala de Hacienda, Begoña Tolosa (PNV), manifestó que el gobierno municipal está de acuerdo con la propuesta de EH Bildu, y se comprometió a habilitar una partida en alguna de las modificaciones de crédito que se harán a lo largo del año. «Ahora no podemos fijar la cuantía porque esta operación depende de que vayan fructicando diferentes gestiones», dijo.

Begoña Tolosa adelantó que el Ayuntamiento ya ha hablado con los responsables de la Diputación sobre la necesidad de construir la glorieta, y que el ejecutivo foral ve con buenos ojos esta intervención. El problema es que su ejecución se complica porque hay muchos propietarios afectados, y hay que negociar con todos ellos: Adif, Homes, GFA y el propio Ayuntamiento. «Ya nos hemos comprometido con la Diputación para que iniciemos gestiones con los propietarios, que faciliten el camino hacia la construcción de la rotonda». «Tenemos que empezar a dar pasos para dignificar esa zona de Olarrain y consensuar la intervención con los propietarios», concluyó la concejala del PNV.

En la otra salida de Tolosa (la norte), justo al otro lado de Olarrain, junto a la gasolinera de Avia, existe también otro proyecto de mejora de salida del tráfico con dos intervenciones diferenciadas (rotonda y puente). La primera ya se ejecutó en 2013, pero para la segunda no hay fecha concreta. La glorieta costó 600.000 euros, de los que la Diputación puso 180.000, y su construcción se materializó en la pasada legislatura.

La construcción del puente exige solventar problemas técnicos de gran envergadura. Desde la Agencia del Agua pusieron una serie de condiciones, todas ellas relacionadas con la inundabilidad del río Oria. El consistorio está trabajando en los cambios sobre la idea inicial que deberá realizar para poder construir en un futuro este puente, que comunicará los barrios de Belate y Olarrain, y posibilitará una nueva salida de Tolosa para el tráfico. Permitirá la mejora de la comunicación de Tolosa con Hernialde, Irura, Anoeta y Alkiza. Su apertura supondrá también la eliminación de varios tráficos de paso y contribuirá a la mejora de la calidad urbana de los ámbitos actualmente afectados por los mismos.