«No se trata de dar unas vacaciones pagadas con la ayuda de paternidad»

A preguntas del PP y de EH Bildu, la consejera de Empleo y Políticas Sociales, Beatriz Artolazabal, dio explicaciones sobre el cambio, e insistió en que se trata de un «borrador sujeto a diferentes informes y todavía tenemos la posibilidad de cambiar, y si yo considero oportuno y necesario, mejorarlo. Por tanto, hasta que ese decreto no esté aprobado, es susceptible de mejorarse siempre que eso beneficie a las familias vascas», respondió. Artolazabal negó que su departamento esté improvisando, como se le acusó desde la oposición, ni que la elaboración de esta ayuda sea una «auténtica chapuza», como lo calificó la parlamentaria del PP Laura Garrido.

Una vez entre en vigor la medida -al día siguiente de publicarse en el Boletín Oficial del País Vasco-, los trabajadores de la empresa privada que sean padres podrán acogerse a una excedencia laboral de 8 semanas, remuneradas al 100% por el Gobierno Vasco, durante el primer año de vida del bebé y sin coincidir con la madre, y de esta forma completar las ocho semanas del actual permiso de la Seguridad Social.

Los requisitos se han definido, añadió la consejera de Empleo y Políticas Sociales, Beatriz Artolazabal, para lograr el objetivo de la corresponsabilidad en la crianza que se persigue con el decreto de ayudas a la conciliación. «Avanzamos un paso más en la igualdad de hombres y mujeres, propiciando que los hombres generen también vínculos muy especiales durante el cuidado de los bebés en sus primeros meses de vida. No se trata de otorgar un permiso o unas vacaciones pagadas: no somos la Seguridad Social», recogió luego en una nota de prensa. La consejería considera necesarias las limitaciones para controlar que la ayuda se destina verdaderamente a cuidar al bebé, y a reforzar el vínculo. «Si la criatura durante la excedencia voluntaria remunerada es enviada a la guardería, no se generan esos vínculos entre los hombres y sus bebés, lazos propiciados por el cuidado», recalcó la consejera de Empleo y Políticas Sociales, Beatriz Artolazabal.

Insistió además en el esfuerzo que está haciendo su consejería, y el Gobierno Vasco en su conjunto, para mejorar las políticas de ayuda a la familia, y recordó que es la única comunidad autónoma que mantiene una línea de ayudas a la conciliación. La excedencia remunerada para completar el permiso de paternidad hasta las 16 semanas es una medida inédita en el Estado. A este capítulo el Departamento le dedicará 25 millones de euros al año, «una importante inversión», reflejó la consejera. También recordó que Euskadi es la única comunidad que otorga ayudas por nacimiento de hijo y adopción «con criterios de universalidad y de derecho subjetivo», es decir, que todas las peticiones tienen que ser atendidas.

Desde el PP, Laura Garrido dijo que estos decretos «llegan tarde», afeó al Departamento el hecho de que la partida de ayudas por nacimiento de hijo no se gasta en su totalidad y preguntó por qué esos fondos 'extra' no se destinan a aumentar otras subvenciones. «El problema es que no hay suficientes nacimientos para que podamos agotar la partida», respondió Artolazabal.

Desde EH Bildu, la parlamentaria Nerea Kortajarena instó a la consejera a «ponerse las pilas» y le preguntó si no es discriminatorio que los funcionarios puedan acogerse al permiso de 18 semanas sin requisitos (tienen dos semanas más, como las madres funcionarias), a diferencia de los trabajadores de la empresa privada. «Tenemos un decreto que no parece que esté construido sobre demasiadas bases si las condiciones pueden cambiarse de una semana a otra», lamentó.

La consejera de Empleo y Políticas Sociales, Beatriz Artolazabal respondió que «discriminatoria es la actual situación en la que se encuentran, demasiado a menudo, porque solo una parte o una persona de la pareja corre con todo el trabajo de la crianza, y también creo que es discriminatorio que ahora solo las mujeres se vean marcadas en sus trayectorias profesionales por ser madres».