El rebrote del virus en hospitales reaviva la alerta y llama a no confiarse
Osakidetza anuncia un cuarto positivo en un visitante de Txagorritxu y otro foco en Basurto con 10 infectados, ocho pacientes y dos sanitarios
Dos inesperados focos de contagio en los hospitales de Txagorritxu (Vitoria) y Basurto (Bilbao) que suman por ahora 14 infectados mantienen ... en guardia a Osakidetza y recuerdan que, aun en sus horas más bajas, el coronavirus sigue presente en Euskadi.
La aparición de estos brotes se produce, además, cuando la comunidad autónoma estrena la fase 3 de la desescalada y la población empieza a hacer una vida que ya se asemeja en algo a la que llevaba en febrero. Un aviso de que la 'nueva normalidad' no debe hacer olvidar la importancia de mantener las medidas de seguridad, sobre todo la distancia de dos metros entre personas, el uso de mascarillas y la higiene concienzuda de manos y superficies. Y de seguir teniendo especial cuidado con los colectivos más vulnerables.
La alerta es doble porque ambos rebrotes se han producido en hospitales, no en una fiesta, barbacoa u oficina. En los dos casos el 'paciente cero' dio negativo en los test de detección del virus en el momento de su ingreso.
El Servicio vasco de Salud trata de descubrir dónde y cómo se contagiaron. Todas las hipótesis siguen abiertas. Desde que ingresaran contagiados pero durante el periodo de incubación, cuando la enfermedad es aún indetectable, hasta que se hayan podido infectar dentro del hospital a través de algún profesional o alguna visita.
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reacción
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GIPUZKOA
Lo que sí se sabe es que a los tres contagios anunciados el domingo en Txagorritxu (un enfermo oncológico que dio positivo tras una operación, otro paciente de la misma unidad y una enfermera), ayer se sumó un cuarto caso. El de la persona que visita regularmente al segundo paciente.
Este brote ha provocado que 23 personas deban permanecer aisladas en cuarentena durante al menos dos semanas, y que hasta el mediodía de ayer se hubieran realizado pruebas de coronavirus a 81 personas, entre trabajadores del hospital y contactos cercanos de los infectados.
Pero no solo es Txagorritxu. La consejera de Salud del Gobierno Vasco, Nekane Murga, informó ayer de otro brote en el hospital de Basurto. Más intenso. La máxima responsable de Osakidetza detalló que hasta el momento se han detectado diez positivos en este foco. Ocho pacientes y dos sanitarios.
Todo comenzó tras identificarse dos positivos en sendos pacientes que habían dado negativo en el momento de ingresar. Ambos se encontraban en el mismo pabellón (Revilla), el más grande del hospital con 168 camas.
De inmediato, se procedió a identificar a los «contactos estrechos» de estas personas, resultando 80 individuos. Hasta el mediodía de ayer se habían practicado 90 pruebas PCR entre pacientes, visitas y sanitarios, aunque Murga ya advirtió que el rastreo continúa y «se está abriendo el abanico». Las diez personas positivas se encuentran ya en aislamiento y las estancias ocupadas por los contagiados, que han sido trasladados a zona covid, se han desinfectado.
Murga puso en valor la «celeridad» con la que Osakidetza ha respondido a estos brotes, y destacó la labor de la red de vigilancia y control (los llamados rastreadores), que «ha logrado identificar a todos los contactos, a los que se ha llamado para indicarles aislamiento y se ha citado para realizar PCR». En el caso de Txagorritxu, en menos de 48 horas.
La consejera admitió que los centros sanitarios son «un caldo de cultivo y un lugar propicio para la propagación» del virus. En este sentido, anticipó que el Gobierno Vasco estudia «incrementar las medidas de seguridad en el acceso de allegados y familiares». Entre ellas, sopesa hacer test PCR a toda aquella persona que visite a un paciente ingresado. Recibir visitas, apuntó, «es un derecho, pero hay que tomar medidas para que el riesgo se reduzca al mínimo».
Suben las infecciones
Cruces cancela los ingresos en Psiquiatría y aísla a 20 pacientes por otro contagio
J. García
Además de los brotes de Basurto y Txagorritxu, Osakidetza trabaja también en contener otro potencial foco de coronavirus. La alarma saltó el pasado miércoles en el hospital de Cruces, cuando un paciente del área de Psiquiatría dio positivo en una prueba PCR. El enfermo fue sometido a este examen al presentar síntomas compatibles con la enfermedad provocada por el Covid-19.
Por ahora se han practicado analíticas al resto de ingresados en la misma zona del hospital baracaldés (podrían ser una veintena, afirman las fuentes consultadas), así como también se están siguiendo los contactos de los profesionales sanitarios que trabajan allí y que están bajo vigilancia. Todos los test habrían dado negativo hasta ahora.
La primera decisión ha sido someter a aislamiento a los pacientes que estaban en ese momento en la unidad, cerrada ahora a nuevos ingresos. Se están derivando a otros centros sanitarios, como Zamudio, a las personas llegadas para recibir tratamiento.
Osakidetza también está analizando cómo se ha podido producir el positivo en un lugar que está mucho menos expuesto al público que el resto del hospital. Psiquiatría es una zona en la que el acceso de personas ajenas al servicio está muy controlada.
También tratan de averiguar si la persona que ha dado positivo llegó con una prueba previa negativa o si, por el contrario, no fue sometida a ningún test. Podría haberse dado el caso de que se hubiera producido un 'efecto ventana', un momento en que el enfermo es portador del agente infeccioso pero la PCR practicada no es capaz de detectarlo.
Ahora se mantiene en aislamiento a la veintena de ingresados. En principio, estará cerrada la unidad hasta el día 17. Las fuentes consultadas consideran que la situación está bien encaminada y esperan que el problema no vaya a más.
La aparición de estos dos focos situó la cifra de nuevos infectados por coronavirus en Euskadi en máximos desde hace dos semanas, con 16 casos en dos jornadas. Una cifra desconocida desde el 25 y 26 de mayo, cuando se acumularon 6 y 12 positivos. Y eso que no todos los positivos en estos hospitales están integrados en la estadística. Algunos fueron validados ayer por la mañana y se incluirán en el balance de hoy. Al mismo tiempo, estos rebrotes han roto una tendencia descendente en la cifra de hospitalizaciones, que crece por primera vez en siete días y pasa de 195 el sábado a 202 anteayer.
Gipuzkoa, entretanto, suma once días sin nuevos contagiados después de que el caso anunciado el domingo, el de una persona que trabaja en el Atlético San Sebastián, diera ayer negativo en el contraanálisis, según confirmaron a DV fuentes del club.
A pesar del ligero repunte de ocho casos el sábado y otros ocho el domingo (7 en Bizkaia y uno en Álava), y a expensas de que Osakidetza sea capaz de controlar todos los contactos de las personas afectadas por los brotes hospitalarios, la epidemia se mantiene estabilizada en Euskadi, donde además de las pruebas PCR, las que detectan si una persona está contagiada en ese momento, hubo otros tres en los test serológicos o rápidos, que determinan si el sujeto ha tenido el virus en algún momento aunque haya superado ya la enfermedad.
Además, hubo que lamentar el fallecimiento de una persona en Bizkaia, según el boletín diario de Osakidetza.
Tras estos datos, el total de vascos a los que se ha diagnosticado Covid-19 asciende a 20.076. Esta cifra es inferior a la de la víspera (20.137). Murga explicó que se debe a que se habría detectado «alguna duplicidad» dentro del proceso de revisión que se hace continuamente de los datos. Lo mismo sucede con el número de fallecidos. A pesar de registrarse una defunción el domingo, el total se mantiene en los 1.574 que ya se computaban el sábado.
Nuevo conteo de recuperados
Del mismo modo, se ha producido un cambio en la metodología de conteo de las personas recuperadas, distinguiendo las sanadas realmente tras dar negativo en el análisis PCR, de las altas hospitalarias, algunas de las cuales seguían infectadas y eran enviadas a casa a finalizar su recuperación. Hasta ayer se incluían ambas en el mismo grupo. El resultado es que también aparecen menos pacientes recuperados (11.902 frente a los 16.966 de la víspera), que se distinguen de quienes por ahora solo tienen el alta hospitalaria (4.184).
Hasta la fecha, en Euskadi se han realizado 340.388 análisis de coronavirus, de los que 220.375 han sido PCR y 120.013 serológicos, a 194.798 personas. Ayer fueron 1.046 PCR y 57 serológicos a 711 individuos.
Además de los 202 ingresados en planta (siete más que el sábado), hay 18 pacientes en UCI, los mismos que el día anterior. En Gipuzkoa hay 25 pacientes Covid en planta y dos en UCI, ambos en Donostia.
La tasa R0, que mide el número de contagios que provoca un enfermo, se disparó hasta 1,19 frente al 0,89 de la víspera. En principio, por debajo de 1 indica que la epidemia está en remisión, y por encima de esa cifra, en expansión. No obstante, Murga restó importancia a esta situación argumentando que con un número bajo de contagios, cualquier variación al alza hace que el indicador se dispare. La consejera afirmó que Euskadi sigue cumpliendo con las condiciones para avanzar en la desescalada.
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