Rafa Sal: «En la primera petición, el doctor objetó pero se ofreció otro médico»
Rafa Sal, Derecho a Morir Dignamente Euskadi ·
La asociación Derecho a Morir Dignamente Euskadi valora de manera «muy positiva» que en tres meses se hayan registrado en Euskadi 8 solicitudes para solicitar ... la eutanasia. «Estos datos confirman que las peticiones existen y que se pueden llevar a cabo», señala Rafa Sal sobre un proceso que «nunca se paraliza» aunque los pacientes se topen con médicos que ejerzan su derecho de objeción de conciencia.
– El Departamento de Salud ha recibido 8 solicitudes de eutanasia en tres meses, ¿qué les parece?
– Es una cifra muy positiva y así se lo hemos transmitido ya a la consejera de Salud. Todas las personas que cumplen con los requisitos que la ley prevé han podido cumplir su deseo. Con datos de este tipo se demuestra que es posible recibir la prestación de ayuda para morir.
– ¿Son pocas o muchas peticiones?
– No tenemos una previsión demasiado concreta para este primer año. Hemos pedido ya al Departamento de Salud tener la posibilidad de estar en contacto con algún interlocutor para que nos permitan tener datos oficiales de todas las peticiones que se hacen. Lo importante ahora es saber que las peticiones existen y se pueden llevar a cabo. Con un poco de tiempo habrá que ver la intensidad de las peticiones. Por experiencia en otros países de Europa se habla de un 1% en los primeros meses y después pasar a un máximo de un 4% de solicitudes de la población.
– Una vez que un paciente decide solicitar la eutanasia, ¿qué pasos ha de dar?
– La ley indica claramente el procedimiento. Normalmente se prevé que el proceso se lleve a cabo en 40 días. Eso sí, se puede acortar la duración que hay en cada paso. No se acorta ningún paso pero sí el tiempo de estos para adelantar el proceso entorno a los 10 días.
– ¿Cuántos pasos se deben cumplir?
– Hay tres momentos claves. Uno, todo lo que ocurre al inicio de la presentación de la solicitud con el médico responsable. Si considera que esa persona solicitante cumple las condiciones y hace un informe favorable se pasa al segundo paso. Entonces entra en el proceso el médico consultor, que valora las garantías y la situación. Si aprueba la petición, el caso pasa al comité de Garantías y Evaluación. Si el informe también es favorable se lo comunican al médico del paciente para que con el afectado resuelva cuando se va a hacer la prestación de la ayuda para morir.
– ¿Sabe si hay muchos médicos vascos que hayan hecho uso de la objeción de conciencia?
– En la primera solicitud que hubo en Euskadi, el doctor del caso objetó pero facilitó que el proceso siguiera su curso, porque estamos ante una ley muy garantista. El sistema prevé estos casos pero el proceso sigue, nunca se paraliza. Ofrece otro médico que se responsabiliza de la solicitud presentada.
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