En varios de los múltiples cursos para directivos de los que he asistido como alumno, me han contado la 'parábola' de la rana. Me han ... explicado que si echamos una rana a una cazuela con agua caliente, esta, nada más tocar el agua, salta fuera. La rana huye del agua caliente. A continuación me contaban que, sin embargo, si metíamos a la pobre rana en una cazuela con agua fría e íbamos aumentando la temperatura poco a poco, la rana no era consciente de los cambios y terminaba hervida, y, naturalmente, muerta.
Con esta 'parábola' querían decirnos que si en una empresa se hacen cambios paulatinos, poco a poco, podemos cambiar la empresa de arriba abajo sin que casi nadie se dé cuenta.
Como 'parábola' es muy interesante, pero como hecho científico es totalmente falso. En 2002, un zoólogo de la universidad de Oklahoma, V. Hutchison, explicó lo que hace la rana. La metemos en la cazuela con agua fría, y la rana está tranquila. Poco a poco vamos subiendo la temperatura, y lo que se observa es que la rana empieza a moverse de un lado para otro cada vez más deprisa y más inquieta. Y llega un momento, en el que la rana salta y se sale de la cazuela. Ese momento coincide con lo que se llama máxima temperatura crítica, que es la temperatura a la cual la rana salta y de ese modo evita quedar hervida.
Cada especie de rana tiene una temperatura máxima crítica a la cual salta de la cazuela. La parábola es un mito.
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