Los teléfonos intervenidos desvelan dificultad para vender las botellas de vino y gestiones en EEUU
Comienza en Cáceres el juicio oral por el robo de las botellas de Atrio con las declaraciones de los primeros testigos; los acusados permanecen en silencio
María José Torrejón
Cáceres
Lunes, 27 de febrero 2023, 14:40
Una de las conclusiones con la que se ha cerrado la primera sesión de la vista oral por el robo de Atrio, que ha tenido ... lugar este lunes en los Juzgados de Cáceres, es que los acusados habrían tratado de vender las botellas de vino sustraídas del establecimiento. Los teléfonos intervenidos por la Policía Nacional desvelan la dificultad para vender las botellas así como gestiones en EEUU para colocarlas.
Según ha relatado uno de los agentes citados como testigos, el volcado de datos del terminal móvil del acusado, Constantín Gabriel Dumitru, revela una conversación telefónica entre éste y otra persona llamada Marcos, en la que le reconocía que «les estaba costando vender el vino y que intentaban hacer gestiones en EEUU». El policía también ha apuntado que en otra de las conversaciones hablan de cambiarlo por un vehículo de alta gama marca Mercedes.
Después de mirarla fijamente durante unos segundos, el recepcionista que la noche del 26 al 27 de octubre de 2021 estuvo de guardia en el hotel-restaurante Atrio de Cáceres no ha tenido ningún tipo de dudas. «Sí, es ella», ha manifestado tajante. Faltaban diez minutos para las once y media de la mañana cuando este hombre ha vuelto a mirar a los ojos a Priscila Lara Guevara, la detenida por la sustracción de las famosas 45 botellas de vino junto a su cómplice y presunto cerebro de la trama, Constantín Gabriel Dumitru.
Fue ella quien le pidió que le hiciera una ensalada poco después de tomar el menú degustación de la casa. No tuvo bastante y, además, más tarde le pidió un postre. «Me extrañó mucho que me pidieran algo de cena después de tomar el menú degustación. Solo me ha pasado dos veces durante todo el tiempo que llevo en el restaurante. Me negué hasta en tres ocasiones», ha manifestado el recepcionista, visiblemente nervioso durante la celebración de la primera sesión del juicio oral del robo de Atrio, que ha arrancado este lunes por la mañana en la Audiencia Provincial de Cáceres.
Ha sido uno de los pocos testigos que no ha tenido vacilaciones para reconocer a la acusada. No ha podido reconocer, en cambio, al acusado. El resto de empleados del establecimiento sí han manifestado que «podrían ser» ellos pero no lo han asegurado de manera tan tajante.
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El juicio ha comenzado pasadas las nueve y media de la mañana en el Palacio de Justicia de Cáceres. Hasta aquí han sido trasladados los dos acusados desde el centro penitenciario en un furgón policial, que han permanecido en silencio. Ella se ha negado a declarar. Él sí ha aceptado responder a las preguntas de la defensa, pero su abogada defensora, Sylvia Córdoba, ha manifestado que no había preguntas para él.
José Polo, el primero en declarar
Tras el turno de los acusados, ha comparecido el primer testigo, José Polo, copropietario de Atrio. También estaba citado Toño Pérez, la otra mitad del negocio, que ha presentado un escrito justificando su ausencia. A preguntas del tribunal, ha explicado que había una cámara de vigilancia en la puerta da de la bodega y otra en la puerta anterior. Dentro de la bodega, ha aclarado, no había cámaras. Tampoco las hay ahora, ha detallado, después que el sistema de cámaras se haya cambiado. «Cien por cien no estoy seguro de que sean ellos. Pueden ser. No soy buen fisionomista», ha apostillado. Una vez terminada su comparecencia, Polo ha reiterado ante los medios de comunicación que, en su opinión, se trata de un robo por encargo y ha dicho, además, que la botellas deben estar fuera de España.
Durante la jornada de este lunes también comparecen los agentes que han formado parte de la investigación. «Supe que eran ellos sin ningún género de duda. Cuando los vi en el aeropuerto, supe que eran ellos», ha manifestado un policía de la Comisaría de Cáceres que se desplazó hasta Barajas para trasladar el pasado verano a los detenidos desde Madrid, hasta donde llegaron desde Croacia, hasta la capital cacereña.
La abogada de la defensa, mientras tanto, ha preguntado a los testigos si la Policía les había sometido a alguna rueda de reconocimiento para identificar a los presuntos autores, cosa que han negado.
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