Una farmacéutica da la clave para guardar harinas, arroz y frutos secos: «Evita que tengan insectos»

En la cocina, pequeños errores pueden tener grandes consecuencias. Algo tan cotidiano como dejar el arroz, la harina o los frutos secos en su envase original, cerrado con una pinza o clip, puede abrir la puerta a una infestación. La farmacéutica Elena Monje lo advierte en un vídeo reciente: «No quiero ponerte nerviosa, pero si almacenas así tus arroces, harinas o frutos secos podrían tener insectos.»

El motivo es más común de lo que parece: hay polillas cuyas larvas «son capaces de atravesar el papel, cartón y plástico de los envases de alimentos no perecederos», y lo hacen sin que te des cuenta. Les atraen especialmente «los sitios sin luz, como los armarios y los cajones y sobre todo, el calor», condiciones que se dan fácilmente en cualquier cocina.

Para evitarlo, Elena recomienda un cambio sencillo pero muy efectivo: «Lo mejor para evitar una infestación de polillas de la comida es traspasar todos esos alimentos a envases de vidrio herméticamente cerrados.» De este modo, no solo se impide la entrada de insectos, sino que se mantiene la calidad de los productos por más tiempo.

Y si ya has notado movimientos sospechosos, actúa sin demora: «Sospecha de los alimentos y pon remedio rápidamente», insiste Monje, recordando que no hay que esperar a que el problema crezca.

Más allá del disgusto o la pérdida de comida, las plagas también comprometen la higiene del hogar. Por eso, conservar los productos secos en tarros de vidrio, limpiar los estantes con frecuencia y revisar el estado de la despensa son pequeños hábitos que pueden evitar grandes sustos.