Un avión sufre daños en un motor tras chocar con un buitre cerca del aeropuerto de Loiu

Un avión con unos 150 pasajeros a bordo chocó este domingo contra un buitre leonado en las proximidades del aeropuerto de Loiu, cuando el aparato se disponía a tomar tierra. Afortunadamente, el incidente se saldó sin mayores consecuencias. No obstante, la colisión de un avión comercial con un ave de considerable tamaño, como esta carroñera, durante la fase de aterrizaje, es un asunto muy serio. Ayer, el animal entró en uno de los motores. La turbina sufrió algunos daños, pero ni se incendió ni se paró, que son las dos posibilidades que los pilotos más temen.

El susto se lo llevó el pasaje de un 'Airbus 320' de Vueling que llegaba de Alicante poco después del mediodía. El buitre se cruzó en el camino de la aeronave a cuatro millas de la pista de Loiu, a unos 1.200 pies (400 metros de altura). El avión sobrevolaba, en ese momento, la vertical de Zamudio.

Los vecinos escucharon «como una explosión». Varias piezas internas del motor cayeron sobre una pequeña urbanización de chalés que hay a la entrada del pueblo. «Pues no le ha dado una chapa metálica a mi marido de casualidad», contaba esta mañana una de las residentes en el lugar. El buitre quedó inmediatamente descuartizado. Una lluvia de carne y plumas se precipitó sobre las citadas viviendas.

A bordo del avión, el piloto mantuvo la calma y comprobó que el motor aún funcionaba. «El aterrizaje ha sido normal», aseguran fuentes de la aerolínea que sufrió el incidente. El 'Airbus 320' tuvo que ser retirado del servicio. Esta mañana estaba aún en fase de revisión/reparación.

Es la primera vez que un avión comercial choca con un buitre de gran tamaño (pueden alcanzar los 3 metros de envergadura alar) en el entorno del aeropuerto de Bilbao. Estas carroñeras ocupan cada vez más territorio en Bizkaia. El cierre hace unos años de los muladares donde comían han hecho que muchas poblaciones de Las Encartaciones o Durangaldea se aproximen a zonas como el Txorierri, que hasta ahora no frecuentaban. Expertos consultados por este diario alertan de la peligrosidad de este tipo de incidentes. En enero de 2106, cuatro personas murieron en Cuenca tras chocar su avioneta con un buitre.