El reto de volver a ganar fuera

Tras aquel 0-1 que el conjunto armero se trajo de Albacete gracias a un craso error del meta del equipo manchego allá por el 9 de septiembre, los de Joseba Etxeberria tan solo han sido capaces de rascar un empate en Almería (2-2) y sendas derrotas dejando malas sensaciones en los feudos del Oviedo (1-0) y Mirandés (1-0).

Consciente de que con lo de Ipurua solo no basta, el elgoibarrés quiere que su equipo muestre el mismo nivel competitivo tanto cuando juega como local, como cuando actúa de visitante, aunque el hecho de que este sea el tercer partido en apenas una semana supone una dificultad añadida a la exigencia de superar a un rival que solo ha perdido un partido en lo que va de campaña, curiosamente en casa ante el Elche (0-3).

Al menos, el preparador elgoibarrés recupera para la causa a Anaitz Arbilla, una vez cumplido el partido de sanción por doble amonestación que le llevó a perderse el choque ante los gaditanos. Ante las numerosas rotaciones que está llevando a cabo en las últimas citas y con Aritz Arambarri aún convaleciente del fuerte traumatismo en el cuello que se produjo en la última visita al Mirandés, es de prever que Etxeberria devuelva al capitán la plaza que le había concedido en todos los partidos anteriores, aunque el buen papel desempeñado por Carrillo y Chema, más frescos por tener menos minutos acumulados en sus piernas, podría propiciar que ambos repitieran en el eje de la zaga. De no ser así, quedaría por ver quién de los dos es el elegido para formar pareja con el navarro.

Esa es solo una de las incógnitas que plantea la acumulación de partidos en esta fase del calendario, en la que también está variando el nombre de los inquilinos de ambos laterales. Corpas y Harrillaga fueron de los destacados ante el Cádiz y tienen muchos boletos para volver a actuar de inicio, al igual que Sergio y Matheus, los dos grandes pilares en la medular.

De modo que los cambios a introducir podrían concentrarse en su cuarteto ofensivo. Se antoja complicado que el técnico azulgrana prescinda de Antonio Puertas y Bautista, los dos efectivos que acumulan la mitad de los 12 goles que atesora el Eibar.