El 1x1 de los jugadores del Eibar ante el Sporting

Desventurado. Un centro-chut de Otero que le rebotó en el cuerpo acabó colándose en su portería, sin que Carrillo ni Fuzato lograran impedirlo.

Desgraciado. Sufrió una infortunada lesión en el tobillo en su vuelta a la titularidad.

Fatídico. Tarde de pesadilla para el capitán, que no frenó a un Dubasín que le hizo un roto para rematar en solitario el gol del empate .

Temeroso. Aunque de primeras trató de sumarse al ataque, la insistencia del Sporting le obligó a replegarse junto al resto.

Plomizo. Sin poder contener las poderosas incursiones del Sporting, se jugó que le señalaran la pena máxima por un derribo a Campuzano en el área.

Acelerado. Aunque en un principio trató de repartir las cartas en materia ofensiva, poco a poco fue perdiendo terreno y después la serenidad que precisaba el equipo.

Vivo. No pudo batir a Yáñez tras el pase que le regaló Puertas, pero el gol terminó subiendo al marcador.

Incierto. Recibió una patada en la cabeza dentro del área visitante que, sorprendentemente pasó desapercibido para el colegiado.

Específico. Se adentró por su flanco para servir un pase a Alkain que generó el rechace que aprovechó Bautista.

Puntual. Estaba donde debía para apuntarse el segundo tanto de la campaña tras recoger el rechace de Yáñez tras un remate de Alkain.

De estreno. Era el único jugador al margen del lesionado Troncho que quedaba por debutar y lo hizo gracias a la lesión sufrida por Carrillo.

Incómodo. Al igual que el resto, no fue capaz de frenar la salida de balón del rival

Inadvertido.

Atropellado. El Sporting tenía el centro del campo bajo su yugo antes y después de su salida.

Sin tiempo ni opción de poder hacer nada.