«Intento incentivar la cultura para que no sean visitas turísticas al uso»
Maider Pérez ·
Es la promotora del turismo de novela que ha estrenado este verano DonostiaEsa sensación de vacío que produce acabar de leer un libro se llena desde este verano con Euskadi de novela (euskaditurismodenovela.com), una iniciativa turística ... que permite recorrer los escenarios de las tramas inspiradas en la ciudad. Maider Pérez guía a donostiarras y foráneos para descubrir, o redescubrir, la capital guipuzcoana de una forma diferente.
– ¿Cómo nace este turismo de novela que desarrolla en San Sebastián?
– Es algo que se me ocurrió en septiembre del año pasado. Fui como turista a Elizondo y allí descubrí las visitas guiadas que organizan en base a la 'Trilogía del Baztán', de Dolores Redondo. Me chincharon un poco para que hiciera lo mismo aquí y me lancé. Empecé a hacer una ruta con las novelas de Redondo y de Ibon Martín en Pasaia, pero se me quedaba un poco corta.
– Y dio el salto a Donostia...
– Me di cuenta de que había un montonazo de novelas ambientadas en la ciudad. En base a ellas fui elaborando mi itinerario.
– Quienes lo hacen se deben sentir como si estuvieran dentro de la trama, casi como sus personajes.
– Sí, pero aunque parece que te diriges a un público muy específico, que ha tenido que leerse los libros, en realidad es una excusa. Si no te has leído ninguno de ellos, también puedes hacer las visitas. No hago spoiler. Lo que sí hago es leer párrafos del lugar que se menciona en cada caso.
«Me di cuenta de que había un montonazo de novelas ambientadas en la ciudad. En base a ellas fui elaborando mi itinerario»
– ¿Qué recorrido suele hacer?
– Comienzo en la plaza Bilbao, donde les hablo de la escritora irunesa de novela negra Noelia Lorenzo y de su último libro, 'Animales heridos' (2022), que tiene a una pareja de ertzainas como protagonistas. Les sitúa en esa misma plaza en busca de un testigo. Es la excusa ideal para abordar la Belle Époque, la Donostia afrancesada...
– ¿Cuál es la siguiente escala?
– La plaza de Gipuzkoa, donde les nombro 'Patria', de Fernando Aramburu, y 'El último gudari', de José María Nacarino. Voy enlazando libros de camino a la Bretxa. Allí les enseño las murallas desde el parking. Les hablo de esa época, de 1813, y de Toti Martínez de Lezea. Tocamos un poco de la historia porque, al final, esta la encuentras en Google. Yo intento ir más al chascarrillo, a lo cercano, como suelen ser mis grupos, de unas tres a seis personas. Ni siquiera se nota que vamos en una visita. Es casi una conversación. Los visitantes no se sienten turistas. Todo lo contrario. Para ello, les doy consejos
– ¿De qué tipo?
– Les hablo del comercio local, de las tiendas pequeñas de toda la vida. Vemos algunas. En ese sentido, soy muy ñoñostiarra.
– ¿Cuál es el perfil de las personas que toman parte en sus visitas de novela?
– Hay de todo. He tenido gente donostiarra y de otros puntos de Gipuzkoa. También tengo turistas nacionales y de otras nacionalidades. Argentinos, uruguayos, israelíes... Cuando viene gente que no es muy leída, aparto el tema de los libros, les doy solo unas pinceladas, y les hablo de películas rodadas aquí. Hago una visita más estandarizada, en la que me centro en monumentos, fechas... Pero tampoco les meto una chapa. La visita dura una hora y media. Cuando pasa de ese tiempo, la gente desconecta.
– O sea, que la personaliza.
– Siempre y es algo que la gente agradece. Me gusta adaptarla a sus necesidades. Si, por ejemplo, vienen con niños, también tengo actividades para ellos.
– Los que no hayan leído los libros antes de la visita, seguro que lo hacen una vez hecha.
– Cuando acabamos la visita, les doy una mapa con el recorrido que hemos hecho y además, una lista con los títulos de los libros de los que les he hablado. Intento incentivar la cultura para que no sean unas visitas turísticas al uso. Por este motivo, quiero promocionar la ciudad desde otro punto de vista, que tenga un componente cultural e incluso organizar un certamen de novela negra como hay en tantas y tantas ciudades.
– ¿Por qué novela negra? ¿Es el género que mejor funciona para llevarles a escenas del crimen?
– Sí. De hecho, las rutas que se hacen en Elizondo tienen su origen las visitas que hicieron las propias guías siguiente la pista de Jack el Destripador. Allí encontraron personas con el libro de Dolores Redondo en la mano y buscando los lugares que indica.
– ¿Qué otros proyectos tiene en mente?
– No descarto hacer visitas más especializadas, como coger una novela y destriparla de arriba a abajo; o hacer una ruta gastronómica en base a los libros.
– ¿Cómo reaccionan los escritores cuando descubren que existen estas visitas basadas en sus novelas?
– Les hace muchísima ilusión y me apoyan. Uno de los autores, Xabier Gutiérrez, escritor y mano derecha de Arzak, me ha dedicado 10 libros para regalar entre los que me valoran en Google con estrella y comentario.
– Escuchándola me da la impresión que disfruta tanto realizando las visitas como planeándolas. ¿Me equivoco?
– No te imaginas. Soy muy salsera. Disfruto mucho. Prepararlas es como organizar un viaje.
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