«Me gustaría estudiar enfermería»
740 profesionales se reúnen con 2.000 estudiantes en el Kursaal para orientarlos de cara a su futuro. «Los jóvenes deben empezar a saber cuál es su vocación»
«Me gustaría estudiar enfermería». Así de tajante se muestra Binta Drame, estudiante de 15 años de Karmengo Ama Ikastetxea, en Pasaia. Lo dice con ... una tímida sonrisa pero bastante decidida. Hasta hace unas semanas dudaba entre varias opciones, incluso de qué rama escogería en bachiller. Pero la jornada organizada ayer por Kutxa Fundazioa en el Kursaal le sirvió para aclarar ideas. «Escuchar a profesionales que te cuentan cómo eligieron y lo que aprendieron en el camino te hace pensar de otra manera», añade.
Como ella, cerca de dos mil estudiantes participaron en una nueva edición del programa 'Inspira Bizitzak', un evento que busca orientar a los jóvenes en un momento clave de su etapa estudiantil: cuando deben decidir qué estudiar y qué rumbo dar a su futuro. Charlas, 'stands' y espacios llenos de conversación directa llenaron un encuentro más centrado en la vocación que en las notas de cada alumno.
Entre los ponentes, Peio Lozano, licenciado en Geografía y profesor titular de la UPV, valoró que estos encuentros «son una herramienta de primera mano para que chicos y chicas que están en una edad complicada, a veces demasiado presionados, puedan ver diferentes caminos y comparar experiencias». Pero él lo tiene claro. Lo imprescindible es que «empiecen a sentir cuál es su vocación».
Lozano, que lleva tres ediciones acudiendo y participando en la iniciativa, insiste en un mensaje. «Hay que estudiar algo que te guste, porque vas a pasar buena parte de tu vida en ello». Sin embargo, además de su propia experiencia, intenta transmitir que esto consiste en un prueba y error. «Si te equivocas, no pasa nada, se puede volver a empezar», resalta.
«Quieren ser 'influencers'»
Entre risas, confiesa que muchos de los jóvenes de hoy en día «quieren ser 'influencers'». Pero ante todo es optimista. Es consciente de que existen «más medios, más oportunidades y más libertad para elegir». En base a sus propias palabras, «un mundo» se abre ante los jóvenes.
«Las personas inspiran», opina Laura Mateos, profesional donostiarra del ámbito de la hostelería. Para ella, «a veces una charla, una mirada o una energía te hacen clic y cambia tu rumbo». Mateos se marcó un objetivo ante tanto estudiante: «Me gustaría que vieran que estas charlas las damos personas que quizá hace veinte años estábamos como ellos». Probablemente lo logró, porque el 'stand' de hostelería estaba abarrotado de jóvenes interesados. «Queremos dejar claro que la hostelería va más allá. Antes quizá la gente no encontraba trabajo y se metía en este ámbito porque era lo 'fácil'. Ahora, cada vez se está profesionalizando más y nosotros tratamos de ofrecerles diferentes oportunidades. Es un sector que requiere tener una formación y tratamos de transmitirlo a los más jóvenes, que poco a poco lo van interiorizando más.»
Durante su intervención, la especialista animó a los estudiantes a seguir lo que realmente les motive. «Me gusta recalcar que uno siempre puede reinventarse. Si algo no te gusta, se cambia. Lo más importante es levantarse con ilusión por lo que haces».
Convencida de que la enseñanza va más allá de la teoría, defiende la importancia de «aprender de cada persona y de cada momento», porque al final «eso es lo que más forma a cada uno». Sin embargo, cree que la sociedad de hoy en día busca un trabajo «cómodo».
Entre nervios, folletos y conversaciones improvisadas, muchos jóvenes se fueron con una nueva perspectiva. «Hablar con ellos te hace descubrir nuevas ideas y aclararte de cara a nuestro futuro», remarcaba Binta. Pero también los hay otros que todavía están un poco dubitativos. Es el caso de Hugo Silva, estudiante de grado medio en Administración de 17 años, que todavía no había tenido «tiempo» de visitar los diferentes puestos, pero que aseguraba que se iría «acercando uno a uno» para ver si podía marcharse del Kursaal con alguna idea clara respecto a su futuro profesional. Porque a pesar de que está estudiando una FP, le gustaría «descubrir» algo que le llame la atención. Para ambos, esta reunión entre alumnos y profesionales viene de «maravilla» y es una «buena oportunidad» para descubrir nuevos mundos. Eso sí, los dos están tranquilos porque aseguran que van a seguir estudiando, y «ojalá algo que nos guste». Porque ese es el objetivo de Kutxa Fundazioa: poner luz en un momento de incertidumbre para los jóvenes estudiantes.
¿Tienes una suscripción? Inicia sesión