El Europa amplía sus instalaciones

El hotel Europa está en obras. Este establecimiento de tres estrellas situado en la esquina de las calles San Martín y Triunfo cambia de imagen, amplía sus instalaciones y a partir del 1 de marzo reabrirá bajo la nueva gestión de la cadena catalana Sercotel, que ya explota otro alojamiento en la capital guipuzcoana: el hotel Codina.

Uno de los objetivos de la reforma es la incorporación del contiguo local que hasta el pasado año ocupaba el bar Haritza, unos metros cuadrados por los que el Europa suspiraba desde hace tiempo. Con este espacio extra se mejorará la recepción y se podrá ofrecer una mejor atención a los huéspedes, según anuncian desde las oficinas centrales de Barcelona.

Pero los trabajos no finalizarán dentro de dos meses con la reapertura parcial del negocio. Los responsables de Sercotel informan de que habrá una «reforma progresiva» hasta mayo o junio, proceso en el que se rehabilitará la fachada y se renovarán la iluminación y las canalizaciones, entre otros servicios. Aunque, sin duda, el principal cambio se percibirá en la decoración de los interiores, tanto en los espacios comunes como en las habitaciones.

La cadena explica que se mantendrá el número de camas, así como la cafetería que está abierta a la calle. Pese a cambiar de manos la gerencia -hasta la fecha era desempeñada por Hotusa, líder mundial de hoteles independientes-, la propiedad del edificio tampoco sufrirá variación alguna.

El hotel Europa se inauguró en 1990, desde entonces se ha sometido a varias restauraciones y en la actualidad cuenta con un total de 68 habitaciones. Se ubica en un inmueble protegido, el número 52 de la calle San Martín, con un grado D en el catálogo municipal de patrimonio. Fue obra del arquitecto Lucas Alday en 1913, con planta baja más cuatro en origen y dos levantes recientes a modo de gran mansarda que sustituyen los retranqueados de 1924, que habían sido proyectados por Ramón Cortázar.

Según se recoge en el Plan Especial de Protección del Patrimonio Urbanístico Construido (Peppuc), la fachada del edificio es de piedra de sillería con miradores de hormigón en chaflán de esquina y hueco lateral extremo a la calle Triunfo.

En virtud del régimen general de protección, el tratamiento de la fachada, la configuración de los huecos de la misma y la implantación de instalaciones, elementos de publicidad, señalización, toldos y otros debe adecuarse a los criterios reguladores establecidos en las ordenanzas urbanísticas.

En cuanto al régimen específico, los sillares son catalogados como «elementos de fachada permanentes», es decir, no se puedan alterar, cubrir ni sustituir. Quedan excluidos de la protección los levantes amansardados de la quinta y sexta plantas. La ficha del edificio, que tiene calificación de uso residencial, recuerda que el interior fue vaciado en los años noventa para su transformación en hotel. Ahora, en 2018, afronta una nueva etapa.