Agresión con arma blanca en San Sebastián

«Eran dos chicos con la cara cubierta y le han apuñalado en la espalda y el brazo»

Los hechos tuvieron lugar justo después de las 16.00 horas, en la zona de acera protegida por una valla a la altura del colegio Presentación de María, frente a los juzgados de Atotxa. Varios chavales que estudian en este centro educativo aseguraron a este periódico que los dos malhechores estaban esperando a la víctima, compañero de ellos. Según apuntaron, los agresores vestían de negro y no estudian en este colegio, porque no les conocían. «Estuvieron un rato ahí fuera, con la cara destapada», apuntó una chica. El menor, al parecer, se encontraba con una joven mayor que él cuando fue abordado por dos varones que para entonces «se habían cubierto la cara con algo». Le propinaron dos puñaladas «en la espalda y el brazo». En concreto, en la zona lumbar y en un tríceps, precisaron fuentes oficiales.

Tras sufrir los pinchazos, la víctima se quitó la chaqueta y se la dio a un amigo, a quien le dijo «llama a mi madre, porque no puedo recoger a mi hermano». En la acera, la Ertzaintza marcó con números los cuatro restos de sangre que cayeron al suelo. Por su propio pie, el chico recorrió la treintenta de metros que separan el lugar donde le hirieron de una base de emergencias en la que suele haber una ambulancia y sus correspondientes sanitarios. Él mismo tocó a la puerta para ser asistido.

La llamada de un particular a SOS Deiak alertó a los servicios de emergencias. Al lugar se personaron otra ambulancia y agentes de la Ertzaintza y la Guardia Municipal, que acordonaron la zona. Mientras unas patrullas se desplegaron por las inmediaciones en busca de los agresores, varios agentes se afanaron en recoger evidencias y testimonios de posibles testigos, especialmente alumnos del citado colegio, pues el suceso ocurrió en el momento en que los chavales salían de clase.

En un corrillo, una chica mostró su extrañeza porque llegó a ver a dos chicos «con la cara descubierta pero guantes negros en las manos. ¿Quién lleva guantes en la calle? Uno se ha ido hacia Egia y otro para Gros». Unos vecinos vieron «una pareja de municipales corriendo y gritando que iban hacia la calle Misericordia», en Gros.

Una hora después de la agresión, una quincena de chavales seguía en las inmediaciones, con el susto aún en el cuerpo. Se vieron varios abrazos y alguna lágrima, mientras eran arropados por la directora del centro y varias profesoras. «Este es un colegio muy tranquilo, y los agresores no son alumnos», confirmaron.

Sobre las seis de la tarde, el propio herido telefoneó desde el hospital al amigo al que le había dado su ropa tras ser apuñalado. Fue una conversación de medio minuto para aclarar su (tranquilizadora) preocupación. «¿Dónde tienes mi chaqueta?».