Una vecina de San Sebastián agradece a quienes ayudaron a su marido: «Empezaron a aparecer ángeles»

La donostiarra Maite Mena ha compartido un emotivo mensaje de gratitud en la sección Sirimiri que publica cada día El Diario Vasco, recordando la solidaridad y la profesionalidad con las que fue atendido su marido tras sufrir un ictus el pasado 14 de febrero en el barrio de Riberas de Loiola de San Sebastián.

En su testimonio, Mena describe el impacto del momento: «De pronto se me paró el mundo: shock, angustia y silencio». Sin embargo, destaca cómo, casi sin pedir ayuda, empezaron a aparecer lo que ella llama «ángeles», refiriéndose a todas las personas que intervinieron en aquellos primeros momentos cruciales. Entre ellos, menciona a un joven que dejó su furgoneta para asistirla, a la mujer que llamó a emergencias y al equipo de la ambulancia que trasladó rápidamente a su esposo al hospital.

El agradecimiento de Maite Mena se extiende también al personal sanitario que atendió a su marido. Destaca el trabajo del radiólogo intervencionista Dr. Larrea y de la neuróloga Dra. Arce, así como el esfuerzo del equipo de la unidad de ictus y de la planta de Neurología. Además, menciona con especial cariño a Eli y a Blanca, enfermera jubilada, que también brindaron su apoyo en esos momentos difíciles.

Más allá de su experiencia personal, Mena quiso hacer hincapié en la calidad del sistema sanitario público, afirmando que «Osakidetza puede estar orgulloso de sus profesionales. Muy orgulloso». Su testimonio pone de manifiesto la importancia de la rapidez en la atención médica en casos de ictus y el valor del compromiso humano en la sanidad.