Captar la naturalidad del movimiento, el gran reto de Barriuso
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Nino Barriuso es el autor de la estatua de la aguadora que este sábado se inauguró en la plaza Sarriegi. El artista, nacido en 1939 en Palencia y afincado en Hondarribia, se ha esmerado en reflejar el movimiento en la escultura, para lo que tanto el gesto -con un pie adelantado- como el vuelo de la falda y los pliegues de la ropa son detalles fundamentales. «El movimiento debe ser natural, armónico, que no se sepa si empieza a termina de tocar», explicó ayer, además de subrayar su empeño en plasmar «una figura que represente a todas las mujeres y con la que todas se puedan identificar».
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