El Antiguoko se extiende al sala

El cambio de aires tuvo lugar durante una conversación entre amigos con Gorka Azpeitia, gerente del Antiguoko. «Entrené durante diez años en el Antiguoko y tengo varios amigos en el club, entre ellos Gorka. Un día, durante una conversación distendida, le comenté la posibilidad de tener una sección de fútbol sala. La idea les pareció fantástica y aquí estamos. Para nosotros significa un cambio tremendo. Desde el mismo nombre hasta las infraestructuras. Ahora vamos a poder atraer o cautivar a jugadores con mucha mayor facilidad. Todo eso nos va a dar el plus necesario para seguir creciendo. Además, creo que el fútbol sala también va a salir muy beneficiado como deporte en sí gracias al nombre y la historia que tiene el Antiguoko». «Puede significar un antes y un después para esta disciplina», sentencia Ballesteros.

Hace dos temporadas disputó su primer año en la Segunda División B estatal tras lograr el ascenso. Por desgracia, el Inter fue incapaz de amoldarse a esta categoría y regresó a Tercera, división en la que este fin de semana debuta ante el Aurrera con la tan característica camiseta azul celeste del Antiguoko. «No cabe ninguna duda de que nuestro objetivo es subir a Segunda División B. Pero no solo subir, sino mantenernos en esa categoría el máximo tiempo posible. Respecto al equipo y al rendimiento deportivo que podamos dar, hay que tener en cuenta en qué situación nos encontramos, de adaptación y crecimiento en este nuevo club. Nos hemos reforzado con algún que otro jugador, pero hay que entender lo que significa cambiar de casa en pleno junio, con el verano de por medio. Tenemos trabajo por delante, pero la plantilla de la temporada pasada ya estaba preparada para ascender y esta también lo está», afirma Ballesteros.

No todos los días son de vino y rosas en esta nueva etapa del Antiguoko Futsal. Todavía se encuentran a la espera de que el Patronato de deportes les conceda un pabellón en el que poder jugar y entrenar de forma oficial. De momento lo hacen en el de Pío Baroja, donde cada dos domingos a partir de las 12.00 horas jugarán partido de Liga. «Me parece surrealista que con la gente que practica deporte en esta ciudad no haya pistas para poder entrenar o jugar un partido. Para que se hagan una idea, el primer equipo, con miras a ascender a Segunda B, entrena en el polideportivo de Mons tres días a la semana y juega en el Pío Baroja sin pisar antes esa cancha. Parece que jugamos fuera. Queremos acercar el fútbol sala al barrio del Antiguo, pero carecemos de pabellón. El equipo territorial entrena y juega Mons. El juvenil, el cadete y el infantil entrenan en Ekintza en un campo cubierto y luego juegan en Mons», asegura Carro.

Antiguoko Futsal también tiene otros equipos en categorías inferiores, donde se encuentran las futuras promesas de este deporte. El sénior B, que juega en territorial, aspira a ascender a Primera y el juvenil no renuncia a estar un día en Nacional. La novedad de este año es la creación de un equipo de infantil (nacidos en 2005 y 2006) con el que esta sección completa toda la escalera hasta arriba. Eso sí, les vendrían bien varios jugadores infantiles y cadetes (2003 y 2004) para contar con plantillas algo más holgadas en número, ya que andan muy justos. Los interesados pueden contactar con Mario (628 89 52 27) o Ander (629 21 19 06) y serán bienvenidos. Aún están a tiempo.