Sin perder la cabeza

Hoy nos medimos a un Mallorca que juega con un 1-5-3-2, sistema que empleó por ejemplo en Copa contra el Girona, al que eliminó justamente. Resulta un equipo muy incómodo, con un entrenador que exige trabajo defensivo y con buenas salidas de balón gracias a jugadores rápidos que suelen aprovechar las pocas ocasiones que generan. La Real tiene que recuperar a esos futbolistas lesionados o cansados y jugar con cabeza fría, sabiendo que la eliminatoria tiene 180 minutos. Con eso no quiero decir que haya que salir pensando en la vuelta. No. Si se puede sentenciar, mejor. Pero lo que no se debe hacer es perder los papeles. Me acuerdo que en la Copa que ganamos nosotros, en la semifinal contra el Athletic, en Atocha y en el partido de ida, acabamos con dos menos. No perdimos la compostura y empatamos. Luego fuimos capaces de ganar en Bilbao.

La Real siempre ha tenido problemas para ganar al Mallorca, así que ninguna confianza. A por todo y, sobre todo, a mantener la portería a cero, lo que considero que sería sinónimo de victoria. Si somos capaces de no encajar, ganamos seguro. Arriba hay calidad y además se puede contar hoy con Kubo, aunque tengo mi teoría sobre su caso y el de Traoré. A lo mejor no deben salir de inicio, porque la paliza que llevan en el cuerpo es considerable y puede suponer un problema no solo para este partido sino de cara a futuro. Ni febrero, ni la temporada terminan hoy.