La Real, en la cabeza de 'Lucho' y Mbappé

Muchos seguidores de la Real prefieren perder el premio al 'fair play' (juego limpio) y recibir la noticia de que Kylian Mbappé es baja para el partido del martes por un esguince de tobillo. O que ha discutido con Luis Enrique y el asturiano, en un ataque de furia le deja sin viajar a Donostia. Ni una cosa ni otra, aunque lo que ocurre alrededor del crack de Bondy hace correr ríos de tinta. En el choque liguero disputado el viernes ante el Mónaco, Mbappé fue sustituido al descanso y, ni corto ni perezoso, se duchó y se puso a hacerse selfies con el que se lo pidiera. Terminó viendo el partido en el palco junto con su madre y agente, Fayza Lamari. Los rumores de su posible salida, su fichaje por el Madrid y todo lo que rodea al mejor jugador del mundo se magnifica y, obviamente, es motivo de debate.

Los tabloides franceses ayer tenían todo tipo de fotos de Mbappé vestido de paisano en el estadio Luis II de Mónaco y los comentarios de un posible desencuentro con Luis Enrique por el cambio y por la actitud del astro galo se contaban a miles. Pero ayer hubo una reunión entre el '10' y el exseleccionador en Poissy, el cuartel general del Paris Saint-Germain, para aclarar los acontecimientos que se sucedieron tras el cambio de Mbappé al descanso. «Tarde o temprano tendremos que acostumbrarnos a jugar sin Kylian. Estoy tratando de encontrar la mejor opción para el equipo. Tal vez me equivoque... o no. Mi filosofía es pensar en lo que es mejor para el equipo. No quiero discutir, es mi decisión», sentenció Luis Enrique en 'Prime Video'. «Es una decisión 100% de entrenador. No hay ningún problema con Mbappé, es simplemente gestionar una situación de la manera que creo que es mejor, nada más», dijo después en rueda de prensa tras el partido del PSG en Mónaco.

El mensaje de 'Lucho' parece claro y lo abrazaría cualquier entrenador. No le sirve de mucho desgastar a su gran estrella si tiene la Liga ganada, si sigue venciendo sin él y así la puede reservar para los choques de más enjundia como es el del martes contra la Real. El mensaje que envía el entrenador asturiano es que «hay que acostumbrarse a jugar sin Mbappé», y cerca del Bernabéu se frotan las manos porque es el refrendo a lo que tanto ansían: ver de blanco a la estrella francesa. Antes de eso se pasará por Anoeta. Dice el asturiano que le utilizará los días importantes. Igual es su último partido de Champions esta temporada...