Irabazi: «Las cosas no se están haciendo bien» en la reforma de Anoeta
El grupo municipal denuncia «falta de transparencia» en el proceso de remodelación del estadio, tomando como ejemplo las recientes correciones impuestas por el OARC
EFE
Viernes, 23 de septiembre 2016, 12:37
El grupo municipal de Irabazi en San Sebastián ha dicho hoy que las tres cláusulas anuladas por el Órgano Administrativo de Recursos Contractuales (OARC) de la licitación de la dirección de obra de la remodelación del estadio de Anoeta demuestran que "las cosas no se están haciendo bien".
El OARC avaló el pasado miércoles los aspectos fundamentales de esta licitación, aunque impuso algunas correcciones que retrasarán de nuevo todo el proceso, en respuesta a las impugnaciones presentadas en su día por Irabazi y el Colegio Oficial de Arquitectos Vasco Navarro.
En concreto, la resolución del OARC impuso correcciones en tres cláusulas de la licitación, ya que no admitió los términos previstos para suspender o desistir el contrato, fijó en cinco los años en los que los posibles licitadores pueden acreditar su solvencia -en vez de en tres- y cerró la puerta a que Anoeta Kiroldegia, la sociedad pública propietaria del estadio, pueda resolver unilateralmente el contrato.
En una nota de prensa difundida hoy, Irabazi ha asegurado que las cláusulas anuladas demuestran que "las cosas no se están haciendo bien, ni de manera transparente, y que no hay financiación" para este proyecto.
"Las cláusulas anuladas por el OARC son las derivadas de la falta de disponibilidad financiera, que han llevado a Anoeta Kiroldegia a establecer una serie de condiciones no permitidas por la legalidad vigente y que ahora tiene que corregir, asegura la coalición de izquierdas.
Ha opinado además que el hecho de que Anoeta Kiroldegia no vaya a recurrir la decisión del OARC y que vaya "a adaptar el pliego de condiciones", supone "otra muestra más" de que Irabazi tiene "razón" cuando sostiene "que las cosas no se están haciendo bien".
"No estamos hablando de arreglar la cocina de casa, estamos hablando de un proyecto que, inicialmente, va a costar más de 50 millones de euros sin contar los probables desvíos a la alza, y que de una forma u otra se pretende que lo financien las instituciones públicas", ha recalcado.
"Se recortan y se cuestionan servicios públicos imprescindibles porque no hay dinero -ha añadido-, pero no hay problema para llevar adelante un proyecto multimillonario que ni siquiera cumple al 100 % con la legalidad vigente".
Irabazi ha insistido además que en los pliegos de licitación "se han introducido cláusulas no permitidas por la legalidad vigente, que suponen actuaciones arbitrarias, contrarias al principio de igualdad y que pueden provocar que haya empresas que desistan de presentarse al concurso".
"Lo que debilita la posición de la administración no es la decisión del OARC, sino el hecho de organizar una licitación sin tener financiación clara e incluyendo triquiñuelas no legales para solventar esa falta de dinero", han concluido Irabazi.