Real Sociedad: un comienzo difícil

La plantilla de Eusebio no está cerrada todavía. Quedan temas importantes por resolver y mucho me temo que, de nuevo, tendremos que esperar hasta el 31 de agosto, último día del mercado veraniego, para comprobar con qué jugadores cuenta exactamente el técnico realista.

De momento hoy solo veremos una cara nueva en Zubieta, la de Juanmi, ya que a los demás les conocemos a todos, incluido a Toño Ramírez. Gaztañaga parece que viene para quedarse y con Hervías, Concha y la gente del Sanse ya veremos qué sucede. Por contra no están Olazabal, De la Bella, Reyes y Bruma. Más bajas, como ven, que altas, en el primer entrenamiento de la temporada y seguramente sucederá lo mismo cuando se cierre el mercado.

Pero digo en el titular, que la Real tiene un comienzo difícil no por eso, porque ahí está la cantera para reforzar al equipo, sino por un tema, el de las lesiones, que por mucho que pese, lastró la temporada pasada al equipo y ahora puede seguir siendo todo un problema.

Agirretxe reconoció el domingo pasado en la edición de papel de este periódico que, a pesar de su duro e intenso trabajo, no está recuperado y puede que no esté al cien por cien para el primer partido de temporada. Sergio Canales también lleva meses esforzándose en su recuperación, pero es posible que tampoco llegue al máximo al inicio de la competición. Navas, después de un año en blanco y de pasar por el quirófano hace un mes y pico, tampoco va a estar a tope. Y hay dudas sobre cómo puedan estar otros hombres como Carlos Martínez, que después de otro año complicado lleva semanas entrenándose o incluso Aritz Elustondo, que no jugó en la gira por Estados Unidos por lesión, después de aquella terrible entrada en Valencia, en el último partido de la temporada, que le dañó la rodila...

A todo esto me refiero cuando hablo de un comienzo difícil. Los primeros entrenamientos irán diciendo cómo están todos, pero el punto de partida no va a ser el más deseado. La pretemporada es la etapa más importante y los jugadores que no la completan lo suelen pagar luego. Con esto no descubro nada.

El problema es que el margen de la Real Sociedad tampoco es grande, porque se espera que la recuperación de sus jugadores, alguno de ellos como Agirretxe, fundamental en el equipo, será paulatina. No tendría sentido salir al mercado a fichar, cuando en un tiempo más bien corto -eso esperamos- estarán recuperados.

Además, está el asunto de Carlos Vela y Jonathas. El del brasileño es muy claro. No va a seguir y el trabajo de la Real Sociedad es recuperar lo invertido en él. Lo que no puede hacer es regalarlo o malvenderlo, porque una cosa es que no se haya adaptado ni a la Real ni sea el más adecuando para su juego actual, y otra muy distinta que se trate de un mal delantero.

En cuanto a Vela, a día de hoy todo parece indicar que se queda y que lo hace comprometido al máximo con el club, con el equipo, con sus compañeros y con los aficionados. Es evidente que el mexicano está ante la temporada más importante de su vida, la que puede marcar su futuro. Puede recuperar su mejor nivel, el que sabemos que tiene, o puede seguir la trayectoria descendente que inició hace unos cuantos meses. Esperemos, por su bien y por el de la Real, que sea lo primero, aunque esto solo el tiempo lo dirá.

Yo repetí varias veces la temporada pasada que creía que Carlos Vela ya ha dado lo mejor de sí. Ahora es el mexicano el que tiene que demostrar que estaba equivocado. Pero una cosa sí tengo clara. No hay otro Carlos Vela. Si se hubiera ido, la Real no hubiera podido fichar otro Carlos Vela porque no existe en el mercado. Por eso y porque ha decidido quedarse, hay que pensar que es más fácil que el de Cancún recupere su mejor juego, que buscarle un sustituto.

Lo que es evidente, por todo lo dicho sobre el estado de algunos jugadores ahora que arranca la pretemporada, es que la Real necesita al mejor Vela desde el primer día. Hasta ahora han sido sus palabras las que nos han hecho creer que está comprometido al máximo con la Real Sociedad. Ahora es el momento de la verdad, la hora de los hechos, con los que tiene que justificar sus deseos de quedarse y trabajar sin desmayo para la Real. Ojalá lo veamos.