El 'Insigne' campeón de Copa italiano y aspirante a todo

El conjunto napolitano es todo un habitual en estas lides. No solo en la Liga Europa, si no también en la Champions League, donde cayeron derrotados la temporada pasada en octavos de final frente al Barcelona por un global de 4-2 a favor de los azulgrana. Es más, los italianos no fallan a su cita anual con las competiciones continentales desde la campaña 2009/10.

Este curso tendrán que 'conformarse' con la segunda competición del Viejo Continente después de una irregular temporada 19/20 con cambio de entrenador incluido y la incorporación de Gennaro Gattuso en sustitución de Carlo Ancelotti, cesado el primer semestre de la campaña después de clasificar al Napoli para los octavos de la Liga de Campeones tras una contundente victoria por 4-0 frente al Genk.

Ya bajo las órdenes del excentrocampista del Milan, el conjunto transalpino sacó su pasaporte para esta Europa League vía Copa y no Liga, donde finalizaron en séptima posición. Los partenopeos ganaron en la final copera a la Juventus de Cristiano Ronaldo en un partido que terminó decidiéndose en la tanda de penaltis y en el que lograron así el billete directo para la fase de grupos.

La crisis sanitaria del coronavirus suprimirá este año los habituales éxodos realistas por los estadios del Viejo Continente como sucedió, por ejemplo, con Old Trafford cuando la Real se midió al Manchester United en la Champions de 2013 y más de 3.000 hinchas guipuzcoanos se desplazaron hasta el Teatro de los Sueños. A pesar de que la UEFA ya ha anunciado que sus competiciones albergarán un 30% de aforo, a expensas claro está de las directrices de las autoridades sanitarias locales, éste será solo de aficionados locales y bajo ninguna circunstancia del equipo contrario.

Y es que para muchos realzales que ayer estaban pendientes del sorteo el drama no fue conocer que uno de los rivales de los blanquiazules iba a ser el conjunto napolitano, sino no poder viajar a Italia para presenciar el Nápoles-Real Sociedad en San Paolo, la casa de Diego Armando Maradona durante siete temporadas. El equipo del sur de Italia, de hecho, cosechó su mayor éxito internacional con el argentino en sus filas ganando esta misma competición, cuando se denominaba Copa de la UEFA, y donde el Pelusa dio la asistencia decisiva para que Ciro Ferrara, curiosamente quien ayer sacó las bolas en el sorteo, anotará el tanto que le dio el título en 1989.

Gattuso no cuenta con la calidad individual que tenía aquel equipo de la década de los ochenta con Maradona, pero poco tiene que envidiar un grupo que cuenta con Koulibaly en el centro de la defensa, el internacional Fabián Ruiz en el centro del campo o con Lorenzo Insigne en ataque, capitán y santo y seña de este Napoli. Una delantera que además cuenta también con el recién llegado Victor Osimhen, ariete nigeriano de 21 años y por el que el club que preside Aurelio De Laurentiis ha echado la casa por la ventana desembolsando este verano 50 millones de euros, y con Fernando Llorente, a priori en la rampa de salida y futbolista que ha sonado varias veces para recalar precisamente en la Real Sociedad.