Isak conduce el balón en el amistoso disputado ante el Eibar en Zubieta.

Las pruebas médicas a Alexander Isak no detectan ninguna lesión en su rodilla

El internacional sueco se entrena con precaución y su concurso ante el Rayo depende de su evolución

Miguel González

San Sebastián

Jueves, 19 de agosto 2021, 07:04

Isak protagonizó la buena noticia de ayer en Zubieta al participar con el resto del grupo en el entrenamiento, lo que le abre una puerta ... para poder jugar el domingo (17.00) ante el Rayo Vallecano en el Reale Arena. No obstante, hay que ser prudentes todavía porque el sueco se ejercitó con mucha prudencia y tampoco se empleó a fondo.

Publicidad

Con todo, es una buena señal que se ejercitase con los compañeros después del susto que sufrió la semana pasada durante un entrenamiento, cuando al realizar un movimiento la rodilla izquierda se le quedó atrás y sufrió una torsión. Se retiró del campo con muestras de dolor, lo que lógicamente alarmó a sus compañeros, pero las pruebas médicas a las que ha sido sometido dictaminan que no sufre ninguna lesión en la articulación.

El percance generó mucha preocupación porque aún están recientes las lesiones del meta Ryan, que en el primer entrenamiento con la Real se dañó el menisco externo de la rodilla derecha, y de Carlos Fernández, que se rompió el cruzado derecho en el amistoso de Holanda ante el AZ Alkmaar. Todavía no se había producido la de Álex Sola contra el Leganés, que también tendrá que pasar por el quirófano.

A pesar de que Isak no tiene nada roto, sentía dolor en la rodilla y por ese motivo Imanol decidió no arriesgar y dejarlo en casa para la visita al Camp Nou, tal y como apuntó en la rueda de prensa previa al partido. «Alex ha entrenado, pero sigue teniendo molestias en el ligamento interno y preferimos evitar una lesión más grave».

Publicidad

El sábado participó en el entrenamiento previo al Camp Nou pero al sentir molestias Imanol prefirió dejarle en casa

Con Isak tocado, Carlos Fernández lesionado y Willian José desconvocado a la espera de que se aclare su situación, la Real formó en Barcelona con Januzaj y Oyarzabal en los extremos y Portu como delantero centro. En el banquillo quedaron como hombres de ataque Bautista, Barrenetxea y Lobete, que entraron en la segunda parte con el marcador en contra y ofrecieron un buen rendimiento, especialmente los dos últimos.

Ahora, con dos partidos en casa ante Rayo y Levante y cero puntos en el casillero, la obligación de obtener un buen resultado es mayor aunque nadie va a arriesgar más de la cuenta.

El descanso le ha venido bien

La llave para jugar ante el Rayo la tiene el propio futbolista, que decidirá en función de sus sensaciones. De momento, lo que sabe es que estos tres días sin pisar el campo le han venido muy bien y que las molestias han remitido, lo que es positivo.

Publicidad

El sábado pudo entrenarse en la última sesión antes de viajar a Barcelona pero notaba dolor en su rodilla y no se veía en condiciones de jugar. Habló con Imanol y el entrenador no dudó en dejarlo en casa. También hay que entender que se incorporó más tarde que sus compañeros a la pretemporada al tener un mes de vacaciones tras disputar la Eurocopa y, a pesar de que su rendimiento fue más que óptimo en el único amistoso que jugó contra el Eibar en Zubieta, en el que marcó un gol, aún está lejos de su mejor estado de forma.

Así las cosas, mientras sus compañeros estaban en Barcelona, se acercó el domingo a Zubieta para ponerse en manos de los fisioterapeutas e iniciar el tratamiento recuperatorio. En el entrenamiento del lunes no saltó al césped y se quedó trabajando con los fisios, lo mismo que el martes, cuando se acercó a Zubieta en el día de descanso. La mejoría en esos tres días fue tan evidente que ayer le permitió ejercitarse con sus compañeros, aunque lo hizo con mucha prudencia ejerciendo de comodín con el poseedor del balón en varios ejercicios del entrenamiento.

Publicidad

Al sueco le han venido bien los tres días que ha estado sin pisar el césped y ayer se ejercitó con cuidado durante el entrenamiento

Después de la Eurocopa que ha realizado y los 17 goles que firmó la pasada temporada le han convertido en uno de los pilares del equipo y el principal referente ofensivo. El juego de ataque se resiente sin su presencia , aunque también es verdad que la Real supo hacer dos goles en el Camp Nou. Pero qué duda cabe que ver a Isak contra el Rayo sería un refuerzo moral muy importante.

Aún quedan tres entrenamientos hasta el partido, desde hoy hasta el sábado, todos a las 10.30. Si sigue por este camino tiene muchas posibilidades de jugar, pero en ningún caso su concurso está asegurado en este momento. Dependerá de su evolución y de las sensaciones que tenga, ya que no hay motivos para arriesgar y la última palabra será suya.

Este contenido es exclusivo para suscriptores

Suscríbete los 2 primeros meses gratis

Publicidad