Urkullu orilla el derecho a decidir y reclama que Euskadi participe en el debate para crear un Estado plurinacional

En su intervención, en la que ha orillado la reivindicación del derecho a decidir, Urkullu ha señalado que los meses que faltan de legislatura deberían servir para buscar consensos hacia un nuevo estatus de autogobierno, ya que no da tiempo para concretar el mismo en lo que queda de la misma y la coyuntura electoral que se avecina no es la más propicia para ello.

El lehendakari ha destacado en ese sentido que su propuesta de hoja de ruta pasa por la exigencia del pleno cumplimiento del Estatuto, la preparación de un nuevo estatus de autogobierno y una convención constitucional que aborde el modelo de Estado en clave plurinacional.

También ha anunciado que, una vez que se constituya el nuevo Gobierno central, pedirá la celebración de la Comisión Bilateral de Cooperación para para darle mayor funcionalidad y culminar el desarrollo pleno del Estatuto de Gernika. En ese sentido, ha vuelto a emplazar al presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, al cumplimento de los compromisos adquiridos en relación con el desarrollo estatutario y que sigue sin cristalizar por la falta de un acuerdo para el traspaso entre ambas administraciones. Urkullu ha revelado que, entre otras materias, el Gobierno Vasco pedirá la transferencia del puerto de Pasaia así como la de paradores turisticos y el FOGASA.

El lehendakari ha realizado un balance positivo de la producción legislativa -35 leyes en estos tres años- y se ha mostrado satisfecho por el cumplimiento de los retos de país planteados al inicio de la legislatura. También ha puesto de relieve en su defecto discurso la importancia que puede tener el reconocimiento del estatus de lenguas cooficiales para el euskera, el catalán y el gallego en el seno de las instituciones europeas.

Este ha sido uno de los mensajes centrales de su discurso, el último de la legislatura que abre un curso de altísimo voltaje político que va a estar marcado, en especial, por la polarización con EH Bildu. Los resultados de las últimas elecciones, tanto las generales de julio como las municiplaes y forales de mayo, inquietan al principal partido que sostiene a Urkullu, el PNV, que ha sufrido sendos reveses electorales de envergaura, al tiempo que EH Bildu experimenta una línea ascendente que aumenta su optimismo ante la cita con las urnas, previsiblemente afinal de la primavera o inicio del verano del próximo año.

La segunda variable de la intervención del lehendakari ha tenido como telón de fondo la incertidumbre dela gobernabilidad española, con una investidura delpresidente del Gobierno aún pendiente. Urkuñlu da por hecho que, tras el fracaso de la elección de Alberto Núñez Feijóo, le tocará el turno al socialista Pedro Sánchez, y ha vuelto a pedir que se haga de la necesidad virtud para aprovechar esta oportunidad histórica que supone brinda tener que negociar la elección del presidente con el respaldo de los nacionalistas vascos y catalanes.